Desde que se dio a conocer la noticia de la epidemia del virus Zika y las repercusiones que ha tenido en Brasil, atletas y autoridades del deporte mundial se han opuesto a participar en los próximos Juegos Olímpicos debido a los problemas de salud que pueden aquejarlos.
Algunos atletas norteamericanos ya lo piensan, muchos en Europa han puesto sus reglas sobre la mesa, pero se dice que hay garantías para que el problema no se salga de control.
Ante la expresión de preocupación, la presidente Dilma Rousseff ha dejado claro que pese a todo se realizará la justa olímpica, ya que se tendrán cuidados especiales con esta epidemia:
Tenemos consciencia de una cosa: Tendremos Juegos Olímpicos y estamos en este proceso con una acción dirigida a eso.
De igual manera aseguró que no habrá problema para los mismos deportistas, puesto que la enfermedad solo afecta a las mujeres que están en gestación y verá cómo evita que alguno atleta tenga problemas:
El Zika no compromete la realización de los Juegos. El virus provoca daños graves en mujeres que están en gestación y algunas ciudades tendrán prioridad como Río de Janeiro.
A pesar de esto muchas de las delegaciones se han pronunciado en contra de la realización o participación en Río 2016, en donde ya no solo la organización es un problema, sino la salud de los mismos.