El futbol ha convertido a Oribe Peralta en un guiñapo. Los números del que sin duda fuera alguna vez el seguro de vida de México y América, subrayan su terrible bancarrota. Hace meses que nadie sabe nada de él. Parece que se refugió en una isla sin playa.
Oribe cambió laureles de gloria por coronas de espinas. Canjeó dos misiles extraordinarios, uno en cada pierna, por dos raquetas de tenis. Y la mira telescópica, perfectamente calibrada, se quebró. Ahora Peralta necesita de dos lupas para moverse en el terreno de juego.
Oribe Peralta, el héroe que se quedó sin voz
Fue tan grande Oribe con este deporte, que resulta increíble su ausencia.Peralta volaba en la cancha, era tan rápido, que su sombra lo perdía de vista. Nadie podrá borrar sus huellos en este juego. Londres 2012, Brasil 2018, por rebobinar algunos momentos del ‘Hermoso Peralta’.
26 goles con la selección, 37 con América, algunos en el momento más oportuno. En los Cuartos de Final del Clausura 2016, América caía 1-0 en el global ante Chivas. Obligados a anotar dos para no quedar eliminados, apareció el delantero para decretar el 2-1.
Pero un día se quedó sin voz…
El último gol de Oribe en el Clásico
El 3 de Marzo del 2018, (Clausura 2018) Oribe marcó el último gol con América, fue en un clásico antes Chivas. Hace 1530 minutos. 17 partidos entre Liga, Liguilla y la Copa de la CONCACAF.
Los partidos de Peralta sin gol
Después del gol ante Chivas, Oribe vio como las buenas rachas de de los futbolistas, también pueden ser las últimas de su carrera. A partir del 3 de Marzo del 2018, Oribe no volvió a marcar. 11 juegos entre la Liga MX, y la liguilla del torneo pasado. Ni un disparo cercano.
Tan mala ha sido su racha, que sus rivales han aprovechado para burlarse de él.
¿Seguro? Por acá ni lo vimos 🤷♂️ #YoCreoEnLaFranja🎽 https://t.co/EQGoQVJrBi
— Club Puebla🎽 (@ClubPueblaMX) 21 de abril de 2018
1,251 minutos sin gol
Son 17 partidos de Peralta sin gol. 11 de Liga y liguilla y 6 más de la Concacaf, Liga de Campeones. El domingo ante Necaxa, el ‘Hermoso’ asistió puntual a su cita con la sequía. Sumó sus primeros minutos sin gol en el Apertura 2018.
¡Ánimo, Oribe!, no claudiques, pues como diría el escritor Rafael Alberti: “¡Qué mar será capaz de no llorarte…”.