En lo que parecía ser una de las mejores campañas virales de la historia del cine, en 2012 la Universidad de Chicago recibió un misterioso paquete: un sobre dirigido a Henry Walton Jones, Jr. mejor conocido como Indiana Jones. El sobre contenía el diario de Abner Ravenwood, el mismo que se puede ver en la película Raiders of the Lost Ark.
El diario es una réplica exacta del que se ve en la película y contiene mapas, anotaciones, dibujos e incluso fotografías de Harrison Ford caracterizado como Indiana Jones. Se puede apreciar es que es un increíble trabajo, sumamente detallado y que seguramente tomó muchísimas horas hacer.
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La Universidad de Chicago buscó exhaustivamente cualquier pista que los pueda llevar al creador de esto, ya que Lucasfilms negó tener algo que ver con el paquete, e incluso creó un post sobre el paquete en su Tumblr con la finalidad de que quien lo lea tuviera alguna noticia.
La gente de Lucasfilms también se mostró sumamente ansiosa por saber quien había enviado y (sobre todo) creado esta réplica del diario. Por otro lado, Garrett Binker, director de la división de estudios superiores, dijo que le gustaba pensar que se trató de la mejor solicitud de ingreso a la Universidad que ésta ha visto.
Sin embargo, la historia deja de ser tan mágica cuando nos enteramos de lo que sucedió en realidad: el artículo estaba a la venta en eBay y fue adquirido algunos días antes por un comprador en Italia enviado desde Guam. En algún punto, el diario –que venía envuelto en un sobre con la dirección de la Universidad de Chicago así como estampillas postales falsas– salió de su empaque original y los del servicio postal confundieron el empaque ficticio con uno real, por lo que lo enviaron a la Universidad de Chicago. Al mismo tiempo, Paul, el vendedor del diario en Guam, al ver que el paquete no había llegado a su destino original, se puso a indagar en internet que pudo haber sido, ya que tal objeto seguro no pasaría desapercibido y fue gracias al post de la oficina de admisiones de la Universidad de Chicago que Paul pudo recuperar el diario y enviarlo a su comprador original. FIN.
Con un poco de suerte, podrán encontrar algunas réplicas del diario hechas por diferentes vendedores en eBay o incluso en Etsy, no obstante esta copia podría ser la mejor de todas ellas, no sólo por lo bien que está hecha, sino por su genial historia.
El texto transcrito del diario se puede leer aquí