Se dice que el camino al infierno está cubierto de buenas acciones. Como lo descubrió el hombre con los pantalones más ajustados del mundo (tanto así que hasta se le salió el pipián) Lenny Kravitz quien después del accidente con sus pantalones, ha buscado la manera de arreglar su imagen.
El roquero abrió una organización que ofrece servicio dental gratuito a la gente pobre de las Bahamas ubicada en Gregory Town. ¿Pero qué puede tener eso de malo? Pues el señor Kravitz no sacó los permisos necesarios para poder abrir su clínica.
Y es por eso que este lunes, los oficiales de inmigración organizaron una redada en las oficinas dentales de Kravitz, donde cuatro dentistas traídos de los EE. UU. se encontraban atendiendo a varias personas.
Los médicos tuvieron que levantar sus cosas en menos de 15 minutos, huyendo literalmente del lugar para evitar su arresto.
No dudamos de las buenas intenciones del buen Lenny, pero, no importa quien seas no puedes andar abriendo locales sin los debidos permisos de las autoridades. Esperemos que este asunto se solucione pronto y sobre todo que las autoridades permitan a la fundación de Lenny Kravitz proseguir con sus actividades en la isla, ya que al final los beneficiados de esto son la gente con pocos recursos de las Bahamas.