No cabe duda que alrededor del mundo se vive el futbol a otro nivel. En Bulgaria se dio uno de los hechos más insólitos de los últimos años, pues un futbolista marcó un gol que le daría el triunfo a su equipo pero cometió el error de festejárselo a los aficionados rivales, por lo que bajaron a la cancha, intentaron golpearlo y al ser detenidos por la policía local, decidieron destrozar una parte del estadio. ¡Vaya cosa!
Vamos a ver cómo pasó todo. Se estaban enfrentando el Levski frente al Ludogorets en un duelo más del futbol de Bulgaria. La visita iba ganando por 0-1 y al minuto 79′ del encuentro recibieron una falta dentro del área por lo que con un penal en puerta este sería el gol que definiera el encuentro.
Cosmin Moti fue el encargado de cobrar el penal; miró fijamente a su objetivo, le pegó muy bien al esférico y marcó el 0-2 para el Ludogorest, por lo que decidió ir a festejarle el gol a los aficionados rivales sin saber que este será su peor error, pues como ya se hizo mención, fue tal la molestia que bajaron al campo en un intento por golpearlo.
La provocadora celebración, de #CosminMoti, que a punto estuvo de acabar en tragedia. Cuando festejó su #gol ante la hinchada rival los radicales intentaron saltar al campo para agredirle pic.twitter.com/XbSu56M4q4
— Han Dicho (@LokeHandicho) 15 de abril de 2019
Afortunadamente la policía detuvo a los aficionados del Levski que trataron de ingresar al terreno de juego pero al no quererse quedar con la frustración de no sacar su furia, optaron por destrozar una parte del estadio.
Los aficionados se abalanzaron contra el túnel que estaba en el campo además de que golpearon gran parte de los asientos de las tribunas, por lo que tras vivir algunos momentos de tensión donde afortunadamente sólo se registraron daños materiales, todo quedó en un mero susto.
🇧🇬 Levski Sofia 0:2 Ludogorec Razgrad
Cosmin Moti po strzeleniu gola, prowokacyjnie stanął przed sektorem gospodarzy. Za taką formę radości, otrzymał drugą żółtą kartkę i musiał opuścić boisko w asyście policji. pic.twitter.com/bfvyJrQdqi— Navijač (@adamwsk) 15 de abril de 2019
Cosmin Moti fue expulsado del encuentro ya que recibió doble tarjeta amarilla, así que a su salida del terreno de juego tuvo que ser custodiado por miembros de la policía ya que los ánimos seguían bastante calientes.
Ludogorest con el triunfo se afianzó como líder de la Championship en Bulgaria tras llegar a 67 unidades; Levski se quedó en la tercera posición tras quedarse con 58 puntos. Esta es una ‘anécdota’ que pasará a la historia del futbol, no hay duda.
