En un día como el de hoy, pero en 1985, ocurrió una de las peores catástrofes ocurridas en la historia del futbol. La terrible tragedia en el Estadio de Heysel, en Bruselas, se llevó las vidas de 39 hinchas bianconeros y a la vez, creó un recuerdo imborrable en la memoria de la Juventus.
Todo ocurrió durante el partido del Liverpool contra Juventus, el cual debía ser considerado como una de las fiestas más recordadas del futbol continental, ya que se estaban enfrentando dos de los más grandes equipos de Europa, que se encontraban en mejor forma que nunca y habían llegado a Bélgica con muchas ganas de demostrar su gran poder en el futbol continental de esos momentos.
Pero las cosas se tornaron feas después de poco tiempo, ya que la expectativa por la contienda era tan grande, que tenía abarrotados a 60,000 y entre ellos, más de 25,000 aficionados de cada equipo. La pesadilla comenzó cuando los aficionados radicales del cuadro ‘red’, quisieron hacer una invasión a las gradas de los hinchas del Juventus.
Esto provocó que muchísimas personas quedaran amontonadas, encerradas unas contra otras; aplastándose contra las vallas y sin poder respirar. El saldo de víctimas afectadas por todo el caos tenía a 600 heridos y los 39 hinchas de la ‘Vecchia Signora muertos; entre todos ellos 32 eran italianos, cuatro eran belgas, dos eran franceses y el último era un aficionado británico.
No sólo fue esta catástrofe en sí lo que marcaría ese día, sino también la mala actuación de los cuerpos de seguridad en la zona. Así como el hecho de que jamás se supo cómo fue que los aficionados ingleses se habían hecho con entradas para la zona del estadio reservada para los espectadores belgas.
Justo en el momento en que había más incertidumbre, muchos ‘juventinos’ comenzaron a saltar de diversas partes del campo para tratar de llegar a la zona afectada y así pelear contra algunos de sus rivales. Cuando la cosa no se pudo poner peor, aparecen los policías y deciden que lo mejor había sido cerrar los accesos en el lugar donde ocurrían los hechos.
Esto sólo podía causar que muchas personas no pudiesen salir y terminar con todo el sufrimiento que ya padecían.
A pesar de todo lo que pasó en ese periodo de tiempo y a las 39 personas que fallecieron en el incidente, el balón siguió rodando. Por último, el encuentro terminó en 1-0 a favor de la Juventus; aunque sería recordado como el triunfo más triste en su historia.
Las consecuencias para Inglaterra fueron grandes, ya que sería sancionada sin que sus equipos pudieran participar en competiciones continentales. Otra consecuencia fue que la FIFA optara por reforzar la seguridad en los estadios, además de añadir medidas especiales, como cámaras de seguridad y prohibición del uso bebidas alcohólicas.
Tanto Juventus, como Liverpool e incluso todo Bruselas recordará este acontecimiento con mucho dolor. Treinta y un años después, esta tragedia resonará en los corazones de muchas personas como el suceso en que la afición y pasión por el futbol acabó con todas esas vidas.