Cuando Paola Pliego anunció que dejaría de representar deportivamente a México, debido a las trabas y corrupción, enumeró algunos nombres, entre ellos el del extitular de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte, Alfredo Castillo, así como a la titular actual, Ana Gabriela Guevara, así como a Carlos Padilla, presidente del Comité Olímpico Mexicano.
Pliego aceptó la invitación de Uzbekistán para representar a ese país en las siguientes competencias y ganarse un lugar en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, para los cuales encontró de nueva cuenta obstáculos para competir con México y justificó su decisión al acusar a Padilla como la cabeza de la corrupción en las federaciones del deporte mexicano.
No hay peor despedida, que la que nunca planeaste hacer, pero recuerda que para empezar una nueva etapa tienes que cerrar otra, el final es de donde empezamos. pic.twitter.com/XH8q1oBiRr
— Paola Pliego (@PaolaPliego) 3 de julio de 2019
“Él ha sido el peor y más porque él se esconde detrás del Comité Olímpico que no tiene nada que ver con el gobierno”, comentó la esgrimista queretana.
Un par de días después de anunciar el cambio de nacionalidad deportiva, Carlos Padilla habló sobre el tema de Pliego y aseguró que tuvo comunicación con el representante de la esgrimista para que comenzara el proceso de clasificación rumbo a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, sin embargo se habría negado.
“Cuando ella es convocada, no quiere ir nuevamente a los procesos de clasificación. Le expresé a su representante que tenía que acatar la orden”, indicó Padilla a ESPN, aunque no aclaró en qué fecha sostuvo dicha conversación.
Sin embargo, Pliego explicó que la decisión de representar a Uzbekistán la tomó un mes antes de publicar la carta en Twitter, ya que no era inscrita a ninguna competencia.
“Empezaban las clasificaciones para Tokio 2020 y no me inscribían a ninguna competencia, ya veía que era momento de decidir ‘o me retiro del esgrima o me cambio de país’ y fue por eso que tomé la decisión”, declaró a Marca.
