El 29 de diciembre del 2016 Carlos Tévez se convirtió en el futbolista mejor pagado del mundo. El argentino dejó al club de sus amores, Boca Juniors, para fichar con el Shanghái Shenhua y volverse millonario.
Casi un año después el nivel de Tévez es muy malo. Apenas ha jugado 14 partidos anotando dos goles y dando cuatro asistencias. Números extremadamente pobres para alguien que gana 634 mil libras esterlinas ¡a la semana!
Pero ahora no solo es que no desquita el sueldo. Además de su mal nivel de juego el nuevo entrenador del equipo chino, Wu Jingui, comentó que está gordo.
En declaraciones para Sky Sports el mandamás del Shanghái habló bastante mal del exjugador de la Juventus.
“Él (Tévez) ha sido informado de mis planes en cuanto a táctica y no lo voy a elegir en este momento. No está preparado físicamente. No está en forma para jugar. Está pasado de peso junto a Guarín. Tengo que tomar la responsabilidad del equipo y de los jugadores. Si no eres capaz de hacer lo que tienes que hacer para jugar, no vale la pena elegirte. He entrenador a grandes estrellas y mis jugadores nunca han dudado de mi reputación”.
El fichaje de grandes estrellas del futbol ha sido un fiasco en China. La mayoría de ellos no ha funcionado, solo han ido a pasar el tiempo y cobrar sus enormes cheques.
Hay reportes que los equipos han entrado en crisis financiera y tendrán que vender. Por lo tanto, el experimento de fichar a jugadores como Tévez quedará como una anécdota en la historia, una bastante chusca y mala.
