A todos nos ha pasado que no estamos de acuerdo con las decisiones del árbitro durante un partido de futbol. Nos hacen enojar y les queremos decir de todo, pero no pasa de un recordatorio a su madre o de un inocente corte de manga.
Pero el defensa del Guarani FC Antonio Ferreira, equipo de la tercera división de Brasil, no se contuvo y terminó empujando al árbitro después de que le mostró la tarjeta roja. En una escena que parece más de un partido del llano, el defensor se volvió loco y todavía buscó meterle sus buenos trancazos, pero tuvieron que llegar sus compañeros para controlarlo.
Pero era tal la furia del Hulk brasileño, que entre sus compañeros no pudieron con él y se necesitó de las autoridades y el cuerpo técnico para llevárselo.
De acuerdo con talkingbaws, en el reporte al finalizar el encuentro, el árbitro Marcus Pereira escribió lo siguiente: “Después de la expulsión, el jugador vino y me empujó, lo que provocó que me cayera al suelo. Es importante mencionar que el atleta tuvo que ser controlado por sus compañeros hasta que la policía lo sacó del estadio”.
Como podemos ver en el video, el árbitro no quiso saber nada de la situación y mejor se fue a esconder detrás de la seguridad. De lo que podemos estar seguros es que el castigo para este jugador será bastante fuerte y no lo veremos por las canchas en mucho tiempo.
Foto: Youtube
