El linebacker de los Cincinnati Bengals, Vontaze Burfict, es conocido por su gran intensidad en el emparrillado. Sin embargo, en más de una ocasión eso lo lleva a pasarse de la raya y cometer errores mentales. En el partido que perdieron contra los Pittsburgh Steelers, Burfict capturó al mariscal de campo, Ben Roethlisberger, pero lo que no se vio a simple vista fue el ‘recuerdito’ que le dio.
Parece que el producto de Arizona State no estaba conforme con la captura, además también quería lesionar a Roethlisberger, algo que logró. Después de este golpe, Burfict también tuvo una falta personal por el golpe que propinó al receptor, Antonio Brown. Aunque aquí se cuestiona la intención de lastimar a Brown.
Burfict tiene un enorme historial de este tipo de actitudes. Desde su épocas en la universidad fue un jugador problemático. Ha sido multado en muchas ocasiones y ahora parece que lo que le espera es una suspensión.
Definitivamente una cosa es ser un jugador intenso y con entrega, pero jamás se debe de pasar a la línea de lo desleal.