Pasaron dos cosas muy tristes, la primera es que nos dimos cuenta que toda la vida se ha escrito mal el nombre del Chaco Giménez (es Cristián sin h) y la segunda, su carta de despedida de Cruz Azul.

El veterano futbolista recibió una patada en el trasero y ahora irá a jugar con los Tuzos. Sin embargo, esto le dolió muchísimo pues siempre fue de los que más entrega tuvo y se nota en su adiós.

El nacionalizado mexicano mandó un mensaje a través de redes sociales, donde agradeció a muchísimas personas y a la institución celeste por estos siete años.

“Han sido días de sentimientos encontrados y muchas emociones. Como siempre dije, estoy agradecido con esta institución que me ha dado todo. Agradecer a la gente que trabaja en La Noria y en el Estadio Azul, son mis hermanos. Jardineros, policías, utileros. A mis amigos, no saben cuánto los voy a extrañar… Hemos vivido cosas muy fuertes juntos tanto tiempo y siempre estuvimos de pie para ayudarnos mutuamente. Los quiero mucho”.

Además, le dedicó unas palabras muy especiales al equipo cementero, con el que siempre se le negó el título de liga a pesar de que lo buscó con todas sus fuerzas.

“A ti, Cruz Azul, ¿Qué te puedo decir?: me adoptaste como tu hijo, tanto tú a mí como yo a ti. No tenemos nada que reprocharnos. Lo intentamos una y mil veces, y sí, quizá no conseguimos el título que tanto buscamos, pero hemos logrado lealtad mutua, y de mi parte amor a la camiseta y de la tuya amor a un jugador”.

Finalmente, no se olvidó de la afición: “De ustedes afición, no me voy a olvidar jamás. Me hicieron sentir como un canterano, sacaron mi máximo potencial”.

El Chaco forma parte de esos 20 años de sequía de Cruz Azul. Sin embargo, su entrega y dedicación provocaron que los seguidores del equipo le tomaran gran cariño, convirtiéndolo en el último ídolo de la Máquina.

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