La MLS nos regaló un juego dominguero para guardar en la memoria durante muchos años, y de paso, nos dio una prueba de lo que se viene para el futuro.
Un partido de estrellas se llevó a cabo entre el New York City F.C. y el Orlando City, el cual terminó 5-3 para los primeros.
Pudimos presenciar sobre la cancha la magia de un Kaká que si bien ya no es el mismo de antes, se encargó de mover absolutamente todo para el Orlando City, un David Villa goleador como en antaño, y el debut de Andrea Pirlo en la cancha.
Grandes goles, postes, pases y jugadas nos regaló este encuentro, ojalá vengan muchos más así.