Ernesto Valverde es el blanco de las críticas por el mal funcionamiento del Barcelona por el pésimo arranque, el peor en los últimos 25 años. Los catalanes sólo han ganado dos partidos, ambos en casa, en cinco fechas, mientras que fuera del Camp Nou es un chiste.
Al estratega se le critica con ferocidad después de la eliminación contra Liverpool en la Champions League y tras la derrota ante el recién ascendido Granada, el cuadro blaugrana cayó al séptimo sitio de la tabla general con siete unidades.
Para el juego ante Granada dejó en el banquillo a Ansu Fati y Lionel Messi, quienes ingresaron al segundo tiempo, pero además de cargar con las críticas por no mandarlos de inicio, Valverde paga por el error de Junior Firpo en el primer gol y por la mano de Arturo Vidal en el penal para el segundo tanto.
“Al final los actores son los jugadores y el entrenador es el responsable”, dijo el timonel en la conferencia de prensa, en la que aseguró que su equipo hoy no merecía ganar. “Me siento responsable de lo que ha ocurrido. Puedes perder pero cuando pierdes tienes que merecer ganar y hoy no lo hemos merecido”.
El timonel lamentó que su equipo no haya sido capaz de tener estabilidad fuera de casa después de tres jornadas, en las que tal vez ha dominado en el trámite del juego, pero su equipo no lo expresa en el marcador. “También es verdad que el rival está acertando a la primera”, comentó.
Desde que arrancó la temporada, Barcelona ha recibido gol en todos los partidos de liga española y en cuatro de ellos el rival se ha puesto por delante en el marcador. Sólo contra el Valencia no tuvo necesidad de remontar. “Independientemente de encajar (recibir) gol o no, hay que pensar en nuestro juego. Y en casa estamos especialmente bien, pero fuera estamos especialmente mal”.
