En el Viejo Oeste de la Liga MX se buscan con urgencia goleadores mexicanos. Atrás han quedado los años de killers mexas que dominan su terreno; ahora han tenido que venir forasteros como Mauro Boselli (Argentina) o Avilés Hurtado (Colombia), para ser los matones de las redes en el pambol nacional durante el A2017.
Esto no es nuevo, los extranjeros han dominado la liga en el ataque, gracias a su puntería más certera en la historia de los torneos cortos. Pero, ¿se debe a una falta de goleadores mexicanos o simplemente hay una cantidad excesiva de foráneos?
En este torneo, se registraron 381 disparos que dieron en el blanco, 214 fueron conseguidos por extranjeros, mientras que solo 167 fueron obra de vaqueros nacionales. De toda esta cantidad, el superlíder Monterrey anotó 29 goles y ninguno fue concretado por un atacante azteca; incluso, el único disparo en el pie que se dieron (autogol) fue de Juninho.
La historia tampoco miente: solo ocho matones mexicanos han encabezado la lista de goleo desde 1996, año en que iniciaron los torneos cortos. Ahora, ¡SE BUSCAN! artilleros como Luis García, Cuauhtémoc Blanco, Jesús Olalde, Everaldo Begines, Jared Borgetti (un par de veces), Omar Bravo, Javier Hernández y Ángel Reyna, quienes han sido los únicos romperredes que han sobresalido en 43 torneos cortos.
Pero este mal no es solo de la Liga MX ya que de las cinco principales competencias de Europa, solo en la Serie A (Ciro Immobile) se pueden presumir goleadores de origen.
Para la Liguilla, ¡SE BUSCA! con urgencia a un nuevo vaquero de corte tricolor. Esperemos que Oribe Peralta (porque no hay más) no se le moje la pólvora y tenga la mira bien puesta en la meta contraria en la Fiesta Grande.