¿Recuerdas a Football Leaks y la información filtrada que dejó en jaque a varios equipos, como el Manchester City o PSG, por obtener dinero fuera de las normas del Fair Play Financiero, entre otros casos? Pues el responsable de estos escándalos será juzgado a partir de este viernes en Portugal, informó Der Spiegel.
¿Quién es el hacker?
El nombre del hacker que puso al futbol europeo de cabeza es Rui Pinto y es un hombre de 31 años de edad, y quien hasta el año pasado vivía en Budapest, Hungría. Para mantener su identidad a salvo, ante los periodistas a quienes revelaba datos se hacía llamar John.
Pinto es un aficionado al futbol y seguidor del Porto, fue capturado en Budapest a inicios del 2019 y fue extraditado a Portugal, donde permaneció casi un año bajo arresto preventivo, para después pasar a arresto domiciliario y obtuvo su libertad en el mes de agosto.
El hacker es responsable de destapar las irregularidades financieras del Manchester City, entre otros equipos, así como el caso de evasión fiscal de Cristiano Ronaldo durante su etapa con el Real Madrid, entre otros escándalos que vieron la luz especialmente en la revista alemana, Der Spiegel.
90 cargos en contra de Rui Pinto
Rui Pinto tiene 90 cargos en su contra, entre los que destaca intento de extorsión y piratería informática. Entre los demandantes se encuentra el Real Madrid, por lo cual que la lógica indicaría que no tiene salida, pero sí la hay.
El hombre de 31 años ha colaborado como hacker con las autoridades lusitanas en otros casos, por lo que obtuvo el beneficio de protección de testigo, pero de cualquier modo él se ha considerado como un denunciador de hechos ilegales y no un criminal.
“Espero ser absuelto ya que soy un lanzador de alerta y he actuado de buena fe”, indicó, según Infobae.
De historiador a hacker
Rui Pinto se formó como historiador en Portugal, aunque no completó sus estudios y tampoco ha ejercido. Ayudaba en el comercio de su padre, quien se dedica a la venta de antigüedades y se convirtió en hacker de manera autodidacta y uno de sus primeros movimientos fue extraer 300 mil euros de una cuenta en Islas Caimán.
Argumenta que ese movimiento lo hizo para demostrar cómo funcionaba el lavado de dinero y la evasión fiscal en dicho paraíso fiscal y una de sus primeras operaciones para obtener datos fue con el Sporting de Lisboa, del cual pudo extraer contratos de jugadores, que fueron fichados con recursos irregulares del fondo de inversión Doyen Sports.
