Luchar es una opción, rendirse no. Esa es la lección que nos ha dejado la estrella del futbol femenil de Estados Unidos, Hope Solo.
Hope Solo registra hoy 118 partidos con la camiseta de la Selección de Estados Unidos. Ha participado en tres ediciones de los Juegos Olímpicos. Fue campeona en Pekín 2008. Ha jugado en el Olympique Lyon de Francia. Pero su historia la fue puliendo hasta hacerla enorme.
Solo nació el 30 de junio de 1981… pero fue concebida en una cárcel. Así es, Judy Solo, su madre había quedado embarazada luego de una visita a su padre, Jeffrey John.
La infancia de Hope Solo es recordada siempre con mucha inestabilidad emocional, debido a los problemas que tenía en casa. Su padre era delincuente y su madre tenía problemas con el alcohol. Así lo ha narrado ella en su autobiografía llamada Memorias de Esperanza.
Sin embargo ella se enfocó en vivir su vida. Se convirtió en scout y cuando había juntado suficiente dinero con sus compañeros, su padre se lo robó. Por eso ella misma ha definido a Jeffrey como “un estafador, un mujeriego y no podías confiar en él“.
Pero no era lo único que su padre le tenía preparado. A los 7 años la secuestró junto con su hermano Marcus y posteriormente volvió a ser arrestado y ella no lo vio por los próximos diez años.
¿Se imaginan? Una niña de 7 años con su padre en la cárcel y su mamá con problemas de alcoholismo. ¿Qué hizo ella? Salir adelante. Fue a la Universidad de Washington en donde se graduó en Comunicaciones. Y fue ahí donde cambió su posición, ya que llevaba algún tiempo haciéndolo como delantera y comenzó a hacerlo en la portería.
Su padre salió de la cárcel y era un hombre totalmente renovado. Se acercaban los primeros Juegos Olímpicos para Hope Solo y no se había perdido un solo partido de su hija, hasta el 2007. Jeffrey se disponía a viajar a New York para verla jugar, cuando sufrió un infarto fulminante.
No hubo tiempo de lamentos. Hope asistió a los Juegos Olímpicos y fue campeona, para después fichar con el Olympique Lyon en un fichaje histórico.
Esconderse y huir de los problemas es fácil. Hope Solo siempre ha afrontado su vida de la mejor manera. No hay obstáculo que ella no supere. Una mentalidad de hierro, un corazón de oro y una guerrera inquebrantable.
