Con las lesiones que han sufrido en la posición de mariscal de campo, los Dallas Cowboys encontraron en su entrenador en jefe, Jason Garrett, el hombre perfecto para que fuera el sustituto de Tony Romo en los entrenamientos del equipo.
A pesar de que tiene 50 años, Garrett demostró que todavía tiene buen brazo al lanzar unas cuentas “espirales” en la práctica del jueves. Para los que no sepan, Jason fue el QB banca de los Cowboys de 1992 a 1999.
Jason Garrett is your third-string QB today pic.twitter.com/RYDLcTm7QM
— Jon Machota (@jonmachota) 4 de agosto de 2016
Incluso, llevó al equipo de la ‘Estrella Solitaria’ a ganar un partido de Día de Acción de Gracias en 1994, cuando Troy Aikman se encontraba lesionado, ante los Green Bay Packers, que eran comandados por Brett Favre.
Short on arms with Kellen Moore out and Tony Romo off, Jason Garrett takes some turns in practice as quarterback. pic.twitter.com/m41esECxNo
— Todd Archer (@toddarcher) 4 de agosto de 2016
Kellen Moore, quien es el suplente de Romo, sufrió una fractura en el peroné y estará fuera de actividad de 3 a 4 meses. Dentro del roster también se encuentran Dak Prescott y Jameill Showers, sin embargo, ninguno de estos jugadores cuenta con experiencia en la NFL.
Es por esto que el cuadro texano buscó contratar a Nick Foles, pero el ex mariscal de campo de los St. Louis Rams, ahora Los Ángeles Rams y los Philadelphia Eagles, decidió firmar con los Kansas City Chiefs.
También se ha especulado sobre la posible llegada de Josh Freeman, pero los texanos todavía no hacen ningún comentario al respecto.
Por el bien de todos los aficionados de los Vaqueros, esperemos que Romo no se vuelva a lesionar, pero con la figura que llegó al Training Camp, no sería algo muy difícil de imaginar.
Porque es imposible que a sus 50 años, Garrett pueda lanzar en un partido y con los jugadores que tienen en la banca, se ve aún más complicado que puedan ganar más de dos partidos sin Romo.
Foto: Getty Images
