Uno trata de ayudarlo, pero el portero del Liverpool, Loris Karius, se esmera en coleccionar críticas gracias a sus errores. El arquero alemán fue el villano de los Reds en la Final de la Champions League, pues gracias a dos osotes suyos, los merengues conquistaron el título con relativa facilidad.

Después se argumentó que el guardameta había jugado con una conmoción cerebral, tras un golpe proporcionado por Sergio Ramos, pero la conmoción no puede durar tanto.

En el primer partido de pretemporada, el alemán se comió una, pero para su fortuna sucedió durante el calentamiento, pero hoy, frente al Borussia Dortmund en la International Champions Cup dio de qué hablar otra vez por sus errores.

El primero de ellos no fue al marcador, pero sí dejó en ridículo al alemán, pues quiso jugar con los pies y entregó el balón a Maximilian Philipp, quien intentó sorprender al arquero casi desde media cancha, pero el arquero del Liverpool agradeció la mala puntería del jugador del Borussia.

El segundo sí repercutió en el marcador en el tiempo agregado, cuando atacó mal un disparo de Cristian Pulisic, dejó el esférico botando en el área chica y Jacob Bruun sólo tuvo que empujar la bola. El partido finalizó con una derrota 3-1 por parte del equipo británico.

Para tranquilidad de la afición del Liverpool, el club de Anfield ya fichó al brasileño Alisson Becker, quien reportará una vez que finalice su periodo de vacaciones.

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Sergio Ramírez es periodista egresado de la Escuela de Periodismo Carlos Septién García, con más de 10 años de experiencia en medios de comunicación. Ha trabajado en Diario Estadio, La Razón de...

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