Champions League, 26 de Mayo 2018 Real Madrid Vs. Liverpool (13:45 CDMX)
¿Cómo ser el Real Madrid siendo el Liverpool, o viceversa? A tal reto mayúsculo se enfrentan dos idealistas tan desiguales, pero con un mismo gen. Ganadores absolutos, conscientes como pocos de la dificultad de gestionar el éxito para que se perpetúe, de rebajar las inflamaciones de la derrota y mantener la mordida y la cara del tigre. Tan intervencionista ha sido Zinedine Zidane con el Real Madrid, como Jürgen Klopp con el Liverpool, que su mejor autorretrato, sin duda, son esos dos extraordinarios acuarelas a los que dirigen…
A uno le va la seda, al otro le va el mazo, y sin embargo se complementan de una forma estupenda, uno gana con una melodía armoniosa, el otro llama a la victoria a partir de un estruendoso concierto de rock y sin embargo, sus vidas son tan distintas, que el futbol nos ha hecho el favor de ponerlas en el mismo lugar…
Mientras ‘Zizou’ se ganaba la vida jugando futbol, “The Normal One”, jugaba al tenis y ensayaba ese maravilloso verbo: ganar. Anecdótico resulta aquel pasaje de Klopp: Su padre era especialmente exigente con él y un día le ganó 6-0 y 6-0 en el Tenis. “Ese día me puse furioso y le grité: ¿Crees que esto es divertido para mí?. Al otro lado de la red, mi padre me respondió todavía más enfadado: ¿Y tú qué te crees, que es divertido para mí?”…
A Zidane, la vida le ponía otra cara en ese momento, su primer automóvil fue producto de su inmenso talento en el tapiz verde: Zizou era tan pobre que el presidente del club Cannes, le dijo: “Si metes gol, te compro un carro”, ‘Zizou’ no volvió a viajar en metro…
Zidane prefiere no anticipar riesgos y sortear cualquier diagnóstico incómodo por evidente que sea. Se aferra a sus titularísimos, ya sean Benzema bajo el ojo de su hinchada, Keylor en sus momentos menos intrépidos, Bale y sus bajonazos, o los violines de Isco. Punto y a partes es Cristiano, el es su regalía perpetua. Zidane le ha dado mil vidas más a este equipazo…
Klopp en cambio, va con la sonrisa desmedida. El Liverpool lleva por mascota el gozo de su técnico. Es un mosquetero al servicio del bien común. La alegría constante de su Heavy Metal en cada uno de sus sonidos electrizantes bajo los botines de Salah, Mane y Firminho. Klopp ha compuesto el mejor “Mata-tridentes” de la isla de Lennon.
Y aquí están los dos, en el mismo universo, espacio y tiempo. El azar, es a veces un bandido, como tantas veces un héroe. A la cima futbolística se puede llegar por varias rutas.