Tom Brady tuvo una campaña impresionante y nadie pone en duda su calidad; sin embargo la clave para vencer a los Texans no es el ataque aéreo sino el juego por tierra. Esta temporada el corredor LeGarrette Blount rompió el récord de más TD terrestres en una temporada para los Patriots con 18 anotaciones; y cuando a Blount no le fue bien New England perdió.
Los Patriots tuvieron marca de 14-2 en la temporada regular y de hecho sólo perdieron un partido con Brady en los controles, contra Seattle Seahawks en la semana 10 y venían de semana de descanso (justo como ahora). En aquel partido contra una de las mejores defensivas de la liga ( la número cinco) Brady no lanzó pases de anotación y sí una intercepción. Es verdad que Martellus Bennett y Julian Edelman han hecho un gran trabajo, pero la ausencia de “Gronk” siempre pesa y los Pats deberán usar más su ataque terrestre.
Es verdad que los Patriots no tuvieron a Tom Brady en la semana cuatro cuando perdieron ante Buffalo, pero aún así existe un factor común de las dos derrotas que sufrió New England esta temporada. En ninguno de los dos juegos el corredor LeGarrette Blount llegó a las 70 yardas por tierra. Contra los Bills se quedó en 54 yardas y contra los Seahawks en 69. Es decir que la clave en las derrotas de los Pats fue el ataque terrestre, y Houston es la defensiva número cinco por tierra, permitiendo un promedio de sólo 64 yardas por partido.
En ninguna de sus dos derrotas los Patriots superaron las 100 yardas por tierra y de hecho si sumando el total por tierra de ambos juegos New England no llega las 190 yardas (181). Además enfrente tienen Jadeveon Clawney y Brian Cushing (aunque este último no ha estado en su mejor nivel). Los Texans también cuentan con el tackle Vince Wilfork, que jugó 10 años en New England y conoce bien el sistema de Bellichick, Wilfork estuvo tres años con los Pats ya con Josh McDaniels de coordinador ofensivo.
Este enfrentamiento también será el duelo número cinco de Tom Brady en postemporada contra la defensa número uno de la liga. El ex de Michigan tiene un récord positivo (3-1) en playoffs ante la mejor defensiva de la liga. Sin embargo su única derrota llegó el año pasado cuando cayeron en la final de conferencia ante los Denver Broncos.
Es decir si Blount no corre para más de 70 yardas ( y las estadísticas dicen que no lo hará) es muy probable que los Texans puedan ganar el encuentro. Pero de igual forma con Brock Osweiler en los controles se ve difícil que los Texans salgan victoriosos y pese a la ausencia de Rob Gronkowski, Tom Brady sigue siendo Tom Brady.
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