¡Que arroje la primera piedra aquel que no haya sido decepcionado en los intercambios navideños! Te luces con el regalo de la persona a quien te tocó y hasta te pasas de la cuenta para hacerla feliz, y en cambio tú recibes un regalo que agradeces con una sonrisa, pero que por dentro estás que te lleva el tren. Algo así le pasó a Checo Pérez con Max Verstappen.
El piloto neerlandés ganó el campeonato de pilotos de Fórmula 1 en parte gracias al trabajo de Checo Pérez desde la sesión de calificación del Gran Premio de Abu Dhabi, por lo que Verstappen elogió y agradeció al mexicano todo lo que pudo.
Primero fue la carta de Verstappen
Por ello, y antes de Navidad, Verstappen le hizo un obsequio muy especial el mexicano, a quien primero entregó una carta, la cual fue leída por el mexicano.
“Querido Checo, te deseo una feliz Navidad. Justo por Navidad, quiero darte algo que puedas usar para hacer más agradables tus días en las carreras. Bien, sé de lo sediento que puedes estar ahí, así que espero que este presente pueda ayudar”, decía la carta.
El mensaje de Max tiene que ver con el Gran Premio de Estados Unidos, en el cual Checo terminó en el tercer puesto y sumamente sediento, ya que en la primera vuelta se desconectó la manguera del depósito de agua, de modo que Checo no pudo tomar agua durante la carrera y terminó totalmente deshidratado.
El regalo para que Checo no tenga sed
Y sí, el regalo de Max Verstappen fue un pequeño garrafón de agua, de poco más de dos litros. El neerlandés, aconsejó a Checo colocarlo a un lado de su asiento, “así nunca correrás sin agua ¿crees que sea suficiente?”.
Checo sugirió algo mejor: llenar el garrafón con tequila durante las vacaciones, pues los pilotos ya rompieron filas y reportarán dos meses después para probar el nuevo auto de Red Bull durante los test.
El regalo que le hizo @Max33Verstappen a @SChecoPerez para que no se vuelva a quedar sin agua! Se pasó! Jaja
— Javier Trejo Garay (@trejogaray) December 23, 2021
Después de lo hecho a lo largo de la temporada, Max Verstappen se hubiera lucido al menos con un regalo más chido, como el que le dio a Chris Horner.
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