El delantero Nicklas Bendtner evitó la prisión, pero la justicia de Dinamarca seguirá muy de cerca, literalmente, cada uno de los pasos del futbolista y conocerá con exactitud su ubicación en todo momento, pues desde este viernes porta una tobillera electrónica mientras cumple una condena de 50 días.
El delantero danés carga con una condena de casi dos meses en libertad condicional después de haberle roto la mandíbula a un taxista en Copenhague durante el mes de septiembre. En noviembre fue encontrado culpable por la justicia de Dinamarca después de probarse los hechos.
El futbolista sostuvo una discusión acalorada con su novia mientras se trasladaban en taxi, del cual bajaron sin pagar. Ante esta situación el taxista los persiguió y arrojó al jugador una lata, lo cual molestó a Bendtner, quien lo golpeó, primero con un puñetazo y después con una patada, lo que generó la fractura de mandíbula. Las agresiones fueron captadas por cámaras de seguridad.
“Desearía que todo esto no hubiera sucedido, ni a mí ni al taxista, que luego perdió su trabajo. Independientemente de cómo se comportara o lo que dijera, no es algo que le hubiese deseado”, publicó el jugador en su cuenta de Instagram.
El futbolista tuvo que indemnizar al taxista con casi dos mil euros, además de pagar el juicio. Reprobó la condena, sin embargo no apelará después de llegar un acuerdo con su club, el Rosenborg, de Noruega, que pese al incidente lo mantendrá en el plantel.
¿Podrá jugar con la tobillera electrónica?
Eso no supone ningún problema para el jugador, ya que en el acuerdo con el club se estableció que se reintegraría al plantel una vez que cumpla su sentencia, ya que tiene prohibido quitarse la tobillera.
De esta manera, el delantero estaría cumpliendo su sentencia a finales de febrero y podría reintegrarse con su club en marzo, mientras tanto tendrá tiempo de llevar a cabo su proyecto de escribir el libro sobre su carrera, la cual ha estado marcado por continuos escándalos.
