No falta mucho para que el nombre de Jordan Pickford aparezca en decenas de notas cada fin de semana. El joven jugador es uno de los guardametas que más prometen en la Premier League y también es el futuro de la portería en Inglaterra.

Tiene años que los ingleses no tienen un guardameta de nivel mundial, David Seaman fue quizá el último arquero británico temido por los delanteros y de todos modos un error suyo dejó fuera a Inglaterra de un Mundial. Actualmente Joe Hart no lo ha hecho del todo mal pero sigue siendo un arquero inconsistente y además ya no es un chamaco.

Sin embargo la Selección de la Rosa pueda estar feliz pues en cuanto Hart ya no esté para ser el titular tiene a dos chamacos que pueden sin problemas cubrir el marco británico. El primero es Jack Butland, que ya lleva un par de años buenos con el Stoke City; el segundo es Jordan Pickford que tomó a la Premier por sorpresa la temporada pasada.

Pickford se formó en las fuerzas básicas del Sunderland; sin embargo los Black Cats siempre lo prestaban a otros equipos de categorías inferiores en Inglaterra. El arquero  fue seleccionado en todas las categorías menores, pero debutó en Premier apenas la temporada pasada luego de que Vito Manone se lesionara.

Pickford atajando un tiro libre frente al Arsenal/ Getty Images

El cancerbero inglés  por fin recibió la oportunidad de ser el guardameta titular del Sunderland y se aferró a ella como un gato que se aferra un mueble; sus actuaciones fueron tan buenas que para octubre del 2016 ya era  e tercer portero del seleccionado nacional y uno de los arqueros más espectaculares de la Premier. Al final de la 2016-2017 el meta británico fue junto con Jermaine Defoe lo único rescatable que tuvo el equipo dicha temporada.

Tras el nivel mostrado era obvio que Jordan Pickford no iría a la Championship; sólo era cuestión de tiempo para que un equipo de la máxima categoría se interesara en sus servicios. El Everton fue el conjunto que se quedó con el arquero, los Toffees pagaron 28.5 millones de euros por el portero, convirtiéndolo así en el tercer guarda vallas más caro de la historia.

Algunos criticaron el movimiento pues les parecía mucho dinero por un portero; sin embargo con el mercado actual y tomando en cuenta que Pickford puede jugar en buen nivel por al menos otros 10 años, el fichaje parece hasta sensato. Además el arquero respondió de inmediato con buenas actuaciones.

El guardameta tiene 23 años, par un portero eso es ser aún joven, por lo que aún le falta mucho para alcanzar su tope futbolísitco. Sin embargo el arquero ya es un compendio de lances y reflejos  y conforme pasa el tiempo va mejorando en las salidas. El surgido del Sunderland aún no debuta con la Selección Inglesa, pero  seguramente pronto lo hará pues después de todo Jordan Pickford es el futuro de la portería británica.

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