Suele suceder que previo a una justa olímpica los problemas de organización y sociales surgen. Sucedió en Beijing con la contaminación del aire y ahora parece repetirse en Río 2016, pero con el agua de algunas sedes.
Nadadores de aguas abiertas, concursantes en remo y canotaje, podrán verse afectados debido a la agresiva contaminación del agua que hasta el día de hoy ha mostrado altos índices de basura y desechos orgánicos.
Un análisis de AP de la calidad del agua encontró peligrosamente altos niveles de virus y bacterias de aguas residuales humanas en las sedes olímpicas y paralímpicas, resultados que alarmaron a expertos internacionales.
En el peor de los casos, si esto no se soluciona en los siguientes meses, los atletas podrían contraer virus y bacterias que les provoquen diarrea, vómito y problemas en la piel.
Los principales sitios afectados son la Marina da Gloria en la Bahía de Guanabara; nadando en la playa de Copacabana; haciendo remo y canotaje en las aguas del lago Rodrigo de Freitas.
Los expertos creen que no se dará solución pronto a esto, por lo que exhortaron a los atletas a llegar antes a la justa para comenzar a crear anticuerpos y así aguantar los problemas sanitarios que se puedan dar.