“Salir de las llamas ese día es algo que marcará mi vida para siempre”. Romain Grosjean es el hombre milagro de la Fórmula 1, al salir por su propio pie de la máxima explosión en el Gran Circo en las últimas tres décadas con apenas quemaduras en las manos, rodilla y tobillos.

Fueron 28 segundos los que tardó Grosjean en salir del auto y ponerse a salvo, sin embargo, es el lapso más grande de su vida y ya piensa en volver a competir, aunque de entrada se perderá el Gran Premio de Sakhir, en Baréin, donde se mantendrá hospitalizado hasta el miércoles.

 

 

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El auto que manejaba Grosjean se partió prácticamente a la mitad cuando impactó con la barrera de contención, lo que dejó expuesto el material inflamable, lo que provocó el incendio, del cual salió con parte del casco derretido y sin una bota.

“Pareció mucho más de 28 segundos. Veo que mi visera se vuelve naranja, veo las llamas en el lado izquierdo del coche. Pensé en muchas cosas, incluido Niki Lauda, y pensé que no era posible terminar así. Ahora no, no podría terminar mi historia en la Fórmula 1 así.

“Y luego, por mis hijos, me dije a mí mismo que tenía que salir. Metí las manos en el fuego, así que claramente sentí arder en el chasis. Salí, y luego sentí que alguien tiraba de mi mono (traje), así que supe que estaba fuera”, mencionó en entrevista con TF1, de Francia.

 

Ya en el hospital, Grosjean ha recibido el apoyo de su familia, especialmente de sus esposa Marion, y de sus hijos Sacha, de siete años y Simon, de cinco.

Grosjean y el escudo de amor mágico

Precisamente Romain se refirió a Simon, quien cree que su papá cuenta con poderes y “un escudo de amor mágico”.

“Estas son palabras muy fuertes de un niño. Mi hijo mayor, Sacha, que tiene siete años, es más racional, trata de comprender. Y mi pequeño ha hecho un dibujo, ‘para las heridas de papá en sus manos’”, compartió.

 

 

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El traje que portan los pilotos de Fórmula 1 les permite estar a 400 grados centígrados por más de 10 segundos en contacto directo con las llamas antes de comenzar a sufrir lesiones, sin embargo, el traje no cubre ni manos ni pies.

Tomará terapia y volverá a correr

Grosjean convivió muy cerca con la muerte, por lo que considera tomar terapia psicológica, aunque también quiere despedirse de la Fórmula 1 en el Gran Premio de Abu Dabi, pues cabe recordar que el francés termina contrato con Haas en la actual temporada.

“Creo que habrá que hacer algo de trabajo psicológico, porque realmente vi venir la muerte… Existe la necesidad de volver al coche, si es posible en Abu Dabi, para terminar mi historia con la Fórmula 1 de una manera diferente”, comentó.

El antecedente de Lauda

Grosjean citó el antecedente del austriaco Niki Lauda, quien sobrevivió a un accidente similar en 1976, aunque las condiciones de seguridad estaban lejos de ser las de ahora, de modo que el austriaco quedó atrapado en el auto en medio de las llamas y sólo salió con ayuda de otros pilotos.

Las consecuencias fueron quemaduras severas en la cabeza y cuerpo, además de diversas fracturas. Se sometió a cuatro cirugías de trasplante de piel, aunque ninguna funcionó debido a que su cuerpo las rechazó, por lo que decidió usar una gorra roja que lo acompañó hasta mayo de 2019, cuando falleció a la edad de 70 años.

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Sergio Ramírez es periodista egresado de la Escuela de Periodismo Carlos Septién García, con más de 10 años de experiencia en medios de comunicación. Ha trabajado en Diario Estadio, La Razón de...

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