A través de su cuenta de Twitter, una usuaria anónima denunció al vocalista de Tool y A Perfect Circle, Maynard James Keenan de haber abusado sexualmente de ella luego de un concierto en el año 2000. El caso, hasta el momento, no ha sido presentado de manera formal y el cantante no ha dado ninguna declaración.

Cuando hablamos de denuncias de acoso o abuso sexual en las grandes industrias del mundo del espectáculo, resulta complicado creer que un popular artista o gran empresario sea capaz de cometer tal crimen, pero para muestra, un botón. Tras haber sido derrocado el magnate de Hollywood, Harvey Weinstein, un montón de cosas comenzaron a suceder respecto a las denuncias de acoso y abuso sexual.

Acusan a Maynard Keenan de abuso sexual
Getty Images

Movimientos feministas tomaron fuerza en todo el mundo y de poco en poco se demostró que ni una de las industrias más grandes del mundo se libra de la inseguridad y el abuso de poder… y parece que en la música pudiera pasar lo mismo.

Si bien denuncias de este tipo no son nuevas en la industria musical -podemos recordar el caso de Alice Glass y Ethan Kath-, mediáticamente está tomando fuerza un nuevo caso que todavía se mantiene en el anonimato. Una usuaria de Twitter, bajo el nombre de @IWas17HeWas36 (Yo tenía 17, él tenía 36 años), acusó a través de su cuenta, al intérprete de “Sober”, de haber abusado de ella cuando tenía 17 años.

La usuaria de Twitter compartió su historia el pasado 22 de junio, y hasta ahora ha sido compartida más de mil veces.

Antes de leerla, te advertimos que puede contener lenguaje sexual explícito:

“Respiración profunda. Debo contar esta historia desde el anonimato porque traté de hacerlo desde mi cuenta real y no pude dar el nombre directamente por temor, así que borré los tweets. Aquí va: yo tenía 17 años y él tenía 36 años.

Fui a ver A Perfect Circle y Nine Inch Nails en el año 2000 junto a mi novio de la secundaria –dejaré la ciudad en un intento por protegerme-. Esperamos ese show todo el año, ya que los dos éramos grandes admiradores, adolescentes obsesionados con buena música.

Estábamos en primera fila y mi novio me abrazaba. La banda comenzó. Maynard me notó entre la multitud. No es que importara mucho lo que vestía, pero llevaba una camiseta sin mangas de NIN y pantalones anchos con botas de combate de suela plana. Maynard me vio y arrojó una botella de agua en mi dirección. Un hombre a mi lado la atrapó. Mi novio y yo nos reímos y pensamos que eso había sido genial.

Minutos después, una mujer rubia, robusta y blanca, se nos acercó. Me miró y me preguntó: ‘¿Quieres conocer a la banda?’. Le contesté: ‘¿Puedo ir con mi novio?’. La mujer corpulenta respondió: ‘Sólo tengo un pase. Puedes conocerlos ahora si quieres’. Le dije a mi novio que lo vería en unos minutos y la seguí a los camerinos. Ella me llevó de vuelta a la zona VIP y nunca la volví a ver.

Maynard estaba sentado en una mesa de picnic y me estaba observando. NIN aún no había salido al escenario, así que pensé que tenía suficiente tiempo para conseguir un autógrafo y regresar al concierto, con mi novio. Como no tenía una hoja de papel, le pedí a Maynard que firmara mi mano. Estaba lista para regresar con mi novio. NIN estaba comenzando y no quería perderme su show, pero Maynard continuó conversando. Me preguntó cuántos años tenía. Le contesté: ‘Tengo 17 años’. Luego me dijo: ‘No puedo hablar aquí contigo, vamos a ver una película’ y me alejó de todos y fuimos hacia un autobús de la gira.

Me llevó a una cama en la parte trasera del vehículo y cerró la puerta. Puso ‘Fear and Loathing in Las Vegas’. Decidí ver algunos minutos para siquiera tener una historia rara que contarle a mi novio más tarde. Sí, los jóvenes de 17 años pueden ser así de ingenuos. Ese es el motivo por el que los hombres adultos se dirigen a las adolescentes.

Él empezó a frotar mi cuello. En dicho punto guardé silencio. Él me habló sobre la película, Johnny Depp y Hunter S. Thompson, mientras comenzaba a sacarse sus pantalones. Todo lo que pude hacer fue sentarme ahí, mirando la película, paralizada.

Me congelé, así que él debió mover mi cuerpo a la posición del misionero. Me quitó mis pantalones. Se ‘forzó a sí mismo’ porque no hubo ningún intento de ‘calentamiento previo’. Menciono eso porque no se trataba de tener sexo conmigo. Se trataba de violarme tan rápido como podía. Penetró mi vagina sin condón, moviéndose con rapidez, mientras yo estaba allí congelada y sumida en un aturdido silencio. Si sueno indiferente es porque ha pasado mucho desde entonces y he tratado de eliminar todo tipo de miedo o vergüenza derivados de una violación.

No hubo consentimiento. Yo no estaba drogada, estaba sobria. Él no me sedujo, me forzó, se aprovechó rápidamente de mi estado de parálisis. Me tomó años procesar sus actos.

Eyaculó sobre mi torso y no me limpió. Había manchas en la parte superior de mi remera cuando salí. No me acuerdo de los minutos siguientes, pero sí recuerdo esto: mi novio estaba aguardando por mí en la entrada donde me habían llevado. Su cara estaba llena de preocupación. No quería alterarlo, así que no le conté nada.

Estoy segura de que esto no suena como una violación. Estoy narrando mi historia porque en el año 2000 el diálogo sobre el consentimiento no existía, por lo menos no en mi escuela. El límite de edad para tener sexo legal en mi Estado es de 16 años. Por suerte para él, en eso se salvó por 1 año.

Han transcurrido 18 años y todavía estoy trabajando en el trauma de ese ataque. #MeToo y #TimesUp han sido una revelación para mí. Espero que todos tengan la oportunidad de curarse. Espero poder sanar yo. Quizá compartir tu historia es parte del proceso de curación de las víctimas de abuso sexual.

Lo mantuve en silencio durante años porque sabía que su legión de seguidores no iba a creerme. Como él eligió no utilizar condón cuando me violó, además me contagió de una cepa del Virus del Papiloma Humano (VPH), que por suerte no era del tipo canceroso.

Después de un tiempo, escuché de parte de un amigo que él hacía eso en cada ciudad, en cada concierto. Prefería a las chicas menores (o lo más cerca posible de ser menor de edad). Es posible que lo mismo le haya pasado a muchas niñas menores a manos de este mismo hombre.

Una advertencia para Maynard James Keenan y todos los tipos como él: dejen tranquilas a las menores de edad. No se aprovechen de la bondad y la confianza de una chica. Ella merece mantener su confianza propia y felicidad para siempre“.

Puesto que el tema es delicado y hablar de acciones atroces provenientes de un artista querido y famoso por fieles seguidores, las opiniones se verán severamente divididas, pero aunque hay muchos que dudan de la veracidad de la historia, existen otros más seguidores que han compartido también relatos similares, en el que Maynard James Keenan abusa de adolescentes en cada uno de sus conciertos.

Acusan a Maynard Keenan, vocalista de Tool, de abuso sexual

Por ahora, de no suscitarse una declaración formal y hasta no escuchar la versión de Keenan, la historia se queda en un simple rumor.

Acusan a Maynard Keenan, vocalista de Tool, de abuso sexual

Medios como Toilet Ov Hell han tratado de contactar a la usuaria de Twitter, así como a representantes de Maynard Keenan, pero hasta ahora no han recibido respuesta.

Todo lo que no sabías que necesitas saber lo encuentras en Sopitas.com

Comentarios

Comenta con tu cuenta de Facebook