Si tuviera a Dios cara a cara y pudiera hacerle una pregunta, la que yo quiera, le preguntaría: “¡¿Por qué diantres permites que exista la cruda?!” ¿Será que lo usa como recordatorio de que los excesos son malos? o simplemente es el “premio” que nos merecemos después de los etílicos ridículos de la noche anterior.

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Sea como sea, la cruda es una realidad. Bendito es aquel que no carga su cruz los sábados o domingos por la mañana, tras una estrepitosa noche de copas y alcohol. Tal vez tú eres alguno de la larguísima (infinita) lista de crudos del día; si es así, probablemente te sea difícil curártela ya que existen muchos remedios que de nada sirven para combatir la resaca e incluso podrían agravar tu condición.

En esta ocasión no venimos a presentarles los más efectivos remedios para esta padecimiento, al contrario, venimos a advertirles que esto NO SE DEBE HACER cuando estamos crudos.

  • “Una tacita de café me va a curar esta cruz” ¡Falso! La cafeína contribuye con la deshidratación del cuerpo y al activar muchos partes de nuestro Sistema Nervioso Central, provocará que nuestro cuerpo esté en un estado de agitación, alejándonos del tan necesario respiro que nuestro hígado merece. Esta es, quizá, la peor manera de querer curar la cruda.

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  • “Si me tomo estas pastillitas se me quita la cruda” ¡Jamás! La automedicación es ultra-peligrosa y aunque tal vez una Aspirina u otro medicamento parezcan inofensivos, podrían contienen algunos compuestos que al combinarse con el alcohol provoquen un estado de shock en tus nervios y pueden afectar severamente a tu hígado.
  • “Con una chelita se cura” Delicioso sí, pero ¡NO! El ingerir una cerveza lo único que hará es que conectes la borrachera. Tu cuerpo tardará mucho más tiempo en procesar las toxinas del alcohol y entorpecerá la recuperación.

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  • “Métete a bañar con agua fría pa’ que se te baje” *Sonido de error en programa de concursos* ¡Tache! El agua fría sólo empeorará tu dolor de cabeza y tus nervios podrían entrar en crisis. Lo recomendable es una ducha con agua caliente, ya que esta te ayudará a que tus músculos se relajen y tu cuerpo transpire el chupe.
  • “Mis tlacoyitos con harta grasita, doña, porque ando bien crudo” ¡Tampoco! El alcohol y las grasas utilizan las mismas vías para su metabolismo. Echarle grasa al chupe del día anterior, sólo ralentizará el proceso metabólico de tu cuerpo y también te hará engordar.
  • “Pues un chesquito pa’ bajarla” ¡Nunca! Las bebidas gaseosas suelen ser las culpables de las peores crudas. Esto se debe a que el gas de los refrescos abre el píloro (válvula que conecta el estómago y el intestino), provocando que el alcohol llegue mucho más rápido y más entero a la sangre.

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¿Te identificaste con alguna de estas frases? Sabes que sí. Ahora ya tienes armas que aunque no evitarán tu cruda, evitarán que se empeore y que te arruine la siguiente noche de fiesta. Por último, te daremos el único y gran consejo que desde el principio de los tiempos ha evitado las peores crudas de la humanidad: ABSTENCIÓN. Así de simple.

Ya si neta les encanta el jolgorio y el aliento etílico, pues aguántense sus crudas.

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Fundé Sopitas como hobby y terminó siendo el trabajo de mis sueños. Emprendedor, amante de la música, los deportes, la comida y tecnología. También comparto rolas, noticias y chisma en programas...

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