Con la Navidad prácticamente en las puertas de nuestras casas, miles de personas se están preparando tanto física como mentalmente, para recibir a las olas de familiares y amigos en esta época decembrina.
A pesar de ser una fiesta de paz, muchos se tensan con la sola idea de la llegada de la fecha, y por supuesto, se encuentran aquellos que simplemente no gustan de celebrar las festividades y prefieren quedarse en sus casas.
Es por esto, que varias televisoras ponen todas las películas que pueden en esos días, a sabiendas de la gente que solo busca pasar una noche tranquilo. Claro, muchas de estas películas son navideñas y eso puede causar escozor en mucha gente.
Si ustedes son de esas personas que simplemente detestan la Navidad, les presento la película perfecta.
¿Qué pasa si ponemos a Tim Allen en una película navideña? Bueno, aparte de convertirlo en Papa Noel… 3 veces, tenemos tal vez una de las peores comedias y mejor aún, una de las películas más antinavideñas de la historia:
Christmas with the Kranks, une a Tim Allen con el talento que es, Jamie Lee Curtis… a, y con Dan Aykroyd.
Teniendo a estos tres monstruos de la comedia, uno pensaría que la película sería muy divertida… pero que equivocados estaríamos.
Después de que su hija, Blair (Julie Gonzalo), parta con el Cuerpo de Paz a Perú en plena época de sembrinas, Luther Krank (Tim Allen), decide hacer cuentas, descubriendo que este año se ahorrará 6123 dólares. Viendo esto como una oportunidad para hacer algo nuevo, planea un viaje con su esposa, Nora (Jamie Lee Curtis).
En un principio, Nora se encuentra indecisa, ya que esta es su temporada favorita, pero al final da su brazo a torcer, siempre y cuando hagan una donación a la iglesia a un hospital infantil. En un principio, Luther reniega de esto y… ya llegamos al primer problema con esta película, y es que Luther, es un imbécil.
Lo que sigue después de esto, es media hora de ver a Tim Allen, actuar como un cretino con Raymundo y todo mundo, dejando claro que la Navidad piensa pasársela por el arco del triunfo, de manera espectacularmente insoportable.
Este tipo de escenario no es nada nuevo y en varias películas con una trama similar, los amigos y vecinos buscan enseñarles la belleza de esta época… pero este no es el caso aquí, oh no señor.
En el momento que los Krank deciden no celebrar la Navidad, todos y cada uno de los miembros de su comunidad, los comienzan a tratar como si ambos fueran la reencarnación de Hitler.
Y es aquí donde el terror comienza, ya que todos deciden que lo mejor que pueden hacer para recordarles el sentimiento de la tradición navideña, es aterrorizarlos, humillarlos y en algunas ocasiones, atacarlos; todo porque se queden a celebrar la Navidad… ¿qué pedo?
Pero la hilaridad explota cuando su hija regresa de su viaje y ambos imbéciles padres se ven obligados a tener que prepara la Navidad y… ya saben para donde va todo esto.
Claro, no sin antes que el personaje de Tim Allen siga comportándose como un idiota, ahora con su familia… pero al final, Luther aprende el significado de la Navidad, después de ser acosado, humillado, despreciado, apabullado y odiado porque simplemente no quería celebrar Navidad una vez… ¡una maldita vez!
Pues sí mis niños, el verdadero significado de la Navidad es el ser intolerante con otros y acosarlos en cada momento que podamos para obligarlos a celebrar tan bonita fiesta… ¿pero qué demonios estaban fumando?
Pero lo peor –sí, hay algo aún peor– es que esta película fue escrita por Chris Columbus, el genio detrás de Mi Pobre Angelito, dos de las películas de Harry Potter, Los Goonies y Pixels… umm, mejor olvidemos que esa película existe, es por el bien de todos.
Aún queriéndolo, no habría sido posible hacer una película con un mensaje peor, ya que la intención de esta bazofia, es la de enseñarnos lo bueno de celebrar la Navidad, pero no; lo único que esta película enseña; es a ser un completo hijo de su madre con quien no este de acuerdo con nosotros.
Por si les hacía falta odiar aún más la Navidad, pues vean esta película que de seguro, sellará por completo su disgusto por esta fecha.
Pero, haciendo a un lado todo esto –eso y que según yo, la Navidad se trataba acerca del nacimiento de Jesus– disfruten de estas fechas para estar con su familia y sobre todo, para ver a aquellas personas que por una u otra razón, les es imposible visitar.
En pocas palabras, ¡tengan una Feliz Navidad!