Cuando uno piensa en vampiros hoy en día, lamentablemente se nos viene a la cabeza la saga de Crepúsculo, la cual, convirtió a estos monstruos en aparadores de diamantina:

Los no vampiros de Crepúsculo

Antes, la imagen de los vampiros era la de un ser trágico, el cual, por más que quisiera regresar a la humanidad, por culpa de su sed de sangre, debía de aislarse del mundo y de aquellos que amaba. Y ahora…

Los no vampiros de Crepúsculo

Muchos culpan de esto a Ann Rice, cuyos libros dieron vida a la película, Entrevista con el Vampiro, la cual era protagonizada por Brad Pitt y Tom Cruise, iniciando con esto la tendencia de los vampiros guapos.

Sin embargo, esto no fue siempre así, ya que en los 80 los vampiros nos pintaban una imagen muy diferente. Inspirados en la escena punk y metalera, los vampiros se convirtieron en la imagen de la rebeldía y la juventud, siendo íconos por excelencia de la libertad que tanto pedían los jóvenes.

Películas como Fright Night y la muy infravalorada, After Dark. Pero ninguna encapsula de mejor manera este sentir, que el clásico de 1987, The Lost Boys.

Sin lugar a dudas, The Lost Boys marcó a toda una generación de jóvenes, quienes encontraron en sus personajes un símbolo de rebeldía, además que el vampirismo es utilizado como una metáfora del deseo por no crecer y obtener responsabilidades.

En especial por el personaje de David, el cual fue interpretado de manera maravillosa por Kiefer Sutherland, quien de pura casualidad, cumple años el día de hoy.

¡Felicidades!

Continuando con la película –que nada tiene que ver con que hoy sea el cumpleaños de Jack Bauer– The Lost Boys nos cuenta la historia de la familia Emerson, en especial del hijo mayor, Michael; quien después de enamorarse con una misteriosa joven llamada Star, se convertirá en miembro de una banda de maleantes, liderada por David.

Encantado por su nuevo “amigo”, David decide transformarlo en un vampiro. Por su lado, el hermano menor de Michael, Sam, se hace amigos de dos empleados de una tienda de cómics, Edgar y Alan; quienes se hacen llamar cazadores de vampiros.

Al poco tiempo, Michael comienza a sentir una insaciable sed de sangre y será trabajo de Sam, el ayudar a su hermano.

Para muchos, la mejor parte de The Lost Boys, es el inicio, ya que es aquí donde se nos presentan varios aspectos importantes de la juventud, como su reticencia a crecer y a dejarse llevar por la presión grupal.

Pero llegando al final, la película se transforma más en un “thriller” de acción, pero aún así, el filme sigue siendo muy entretenido.

Sin lugar a dudas, The Lost Boys es una de las grandes joyas de los 80, además que demostró el rango como actor de Kiefer Sutherland, quien años después, encontraría la fama con la serie, 24.

24

En fin, si ustedes no han visto The Lost Boys, ¿pues cómo que esperan? Aunque los vampiros no sean lo suyo, esta película puede ser disfrutada por todos, gracias a sus increíbles personajes.

Décadas después de su lanzamiento, sacaron una secuela de la cual no vale la pena hablar… en serio.

Ah, sí, ya les dijimos que hoy es el cumpleaños de Kiefer Sutherland, ¿verdad?

Salud

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