Ve por pañuelos porque seguro este video te hará llorar… Luego de que el pequeño Roman fuera diagnosticado con espina bífida (una malformación congénita de la espina dorsal que causa incapacidad o muchas dificultades para caminar), sus padres se negaron a dejarlo solo, así que estuvieron siempre al pie del cañón motivándolo para que pudiera caminar y valerse por sí mismo… y lo consiguió.
Desde que se enteraron, los padres de Roman han estado compartiendo el progreso de su pequeño a través de una página de Facebook y, recientemente, mostraron al mundo una reacción que no podría ser más tierna: Roman logró caminar… ¡y lo festejó con Maggie, su perrita!
Si hay algo que le gusta hacer a los niños es llamar la atención… no es para menos, siendo pequeños que recién van descubriendo lo maravilloso de la vida, hasta el movimiento de una mano es digno de aplausos. Sin embargo, el caso de Roman es especial, pues su desarrollo fue muy diferente al de un niño normal.
Por ello, cuando al fin pudo caminar -pese a que su condición se la pusiera difícil- festejó en grande su hazaña… y lo se lo presumió a su amiga de cuatro patas, Maggie.
“No solo caminó por todo el patio sino que cruzó la calle y bajó por la carretera, dio media vuelta y regresó sin mi ayuda. Obviamente, yo estaba a su lado si me necesitaba pero ¡él no me necesitaba! Nada. Estoy pensando que vamos a abandonar el andador mucho antes de lo esperado”.
Aunque Roman tuvo que caminar usando un par de muletas, este sin duda fue un gran logro para él y seguramente su perrita Maggie también se emocionó.
El defecto de la espina bífida sucede cuando la médula espinal no logra desarrollarse bien. Esta condición puede tener varios síntomas, como por ejemplo una vellosidad anormal, una protuberancia en la espalda o una marca similar a un lunar.