Un perrito fue rescatado y luego se hizo mejor amigo de un ladrillo

Seguramente leíste el título y dijiste “WTF?!” o tal vez usaste la vieja confiable de “Ash!, otra vez tú, sopibecario”, pero lo cierto es que estás aquí porque, igual que el resto del mundo, amas a los perritos. En esta ocasión, toca contar la historia de Sunny, un perrito que fue rescatado cuando era pequeño y al poco tiempo, no sólo consiguió una nueva familia, sino también un nuevo mejor amigo: un ladrillo.

Hace un año, una joven de 19 años llamada Arianna Smoak, rescató a Sunny, sus hermanos y su mamá, quienes se encontraban en muy malas condiciones. Así lo reveló en una entrevista que le hizo Buzzfeed News, donde dijo lo siguiente: “Lo rescaté a él y a sus hermanos el año pasado de la calle. Estaban todos cubiertos de pulgas y a la madre le faltaban dientes y una condición de la piel. Los cuidamos durante semanas”.

Al parecer, Arianna y Sunny hicieron click inmediatamente, pero tal vez el amor (o comodidad) le ganaron a este perrito que desde pequeño siempre se sintió bien recostado a lado de un ladrillo: “Desde que era un cachorro, solía acostarse con él, lo besaba y lo masticaba. No sabemos porqué y nuestros otros dos perros no tienen interés en ello jaja”.

Las fotografías que Arianna compartió en redes sociales pronto se hicieron virales (¿ven? A todos les gustan los perros) y más usuarios de Twitter decidieron hacer lo propio y compartir a sus mascotas junto a sus mejores -y raros- amigos: “Estoy feliz de mostrarle al mundo al loco que veo todos los días”.