La innovación tecnológica ha puesto de frente a dos grandes de la computación. Hasta hace unos meses IBM, tenía la patente de la computadora más pequeña del mundo con un dispositivo que mide en escala 1/10, tan pequeño como un grano de sal. Sin embargo, el gusto les duro poco, pues un grupo de investigadores de la Universidad de Michigan inventaron una computadora que mide tan sólo 0.3 mm de lado, la mitad de un grano de arroz.
De hecho, la universidad fue la primera en construir la computadora más pequeña del mundo, llamada “Micro Mote” de 2x2x4 mm en 2014, capaz de almacenar los datos cuando el dispositivo se desconecta de la luz, pero como un desafío de modernidad, así como por las inclemencias de la competencia, se vieron obligados a rediseñarla.
Pero en el proceso, tanto IBM como Michigan, se llevaron una gran sorpresa. A pesar del diminuto tamaño y el millón de transistores que contienen, ambos microdispositivos son incapaces de retener la información cuando se pierde la fuente de alimentación eléctrica. En pocas palabras, estas computadoras eliminan cualquier rastro de información en cuanto se apaga o se quita el cable que conecta a la luz.
Además de la RAM y la energía fotovoltaica, los nuevos dispositivos informáticos tienen procesadores y transmisores y receptores inalámbricos. Debido a que son demasiado pequeños para tener antenas de radio convencionales, reciben y transmiten datos con luz visible. Una estación base proporciona luz para la potencia y la programación, y recibe los datos.
Por lo que ahora el principal debate es si se deben llamar computadoras: “No estamos seguros si deberían llamarse computadoras o no. Es más una cuestión de opinión si tienen la funcionalidad mínima requerida “, dijo David Blaauw, profesor de ingeniería eléctrica e informática, quien dirigió el desarrollo del nuevo sistema junto con Dennis Sylvester, también profesor del ECE, y Jamie Phillips.
Los expertos de la universidad, decidieron tomar ventaja y solucionar el dilema con la luz de la estación base y del LED de transmisión propio del dispositivo puede inducir corrientes en sus pequeños circuitos.
“Básicamente, tuvimos que inventar nuevas formas de abordar el diseño del circuito que sería igualmente de baja potencia, pero también podría tolerar la luz”, dijo Blaauw a través de un comunicado de prensa.
¿Para qué sirve la computadora más pequeña del mundo?
En los próximos años, ambas instituciones se dedicarán a perfeccionar sus micro dispositivos, sin embargo, como dato curioso, ninguna de las dos computadoras servirá para los fines que fueron creadas.
Universidad de Michigan
Diseñado como un sensor de temperatura de precisión, el nuevo dispositivo convierte las temperaturas en intervalos de tiempo, definidos con pulsos electrónicos. Los intervalos se miden en chip contra un intervalo de tiempo constante enviado por la estación base y luego se convierten en una temperatura. Como resultado, la computadora puede informar temperaturas en regiones minúsculas, como un grupo de celdas, con un error de aproximadamente 0.1 grados Celsius.
El sistema es muy flexible y podría ser reinventado para una variedad de propósitos, pero el equipo eligió mediciones de temperatura de precisión debido a una necesidad en oncología. “Dado que el sensor de temperatura es pequeño y biocompatible, podemos implantarlo en un ratón y las células cancerosas crecen a su alrededor” afirmó Gary Lucke, colaborador del proyecto y profesor de radiología e ingeniería biomédica.
“Cuando creamos por primera vez nuestro sistema milimétrico, en realidad no sabíamos exactamente todas las cosas para las que sería útil.” Asegura Blaauw. Sin embargo los científicos aún exploran las diferentes variables en las que se podría utilizar. Hasta el momento, se ha comprobado su función en las siguientes áreas:
- Detección de presión dentro del ojo para el diagnóstico de glaucoma
- Estudios de cáncer
- Monitoreo de yacimientos de aceite
- Monitoreo de procesos bioquímicos
- Vigilancia: audio y visual
IBM
La multinacional líder en tecnología, consiguió crear la computadora más pequeña del mundo, a un costo de fabricación de menos de 10 centavos de dólar, según sus proyecciones estará disponible en el mercado hasta dentro de cinco años. Hasta el momento, el microordenador es capaz de monitorear, comunicar y analizar información, pero International Business Machines Corporation, encontró la manera perfecta de solucionar la disyuntiva.
En los próximos cinco años, las computadoras diminutas, más pequeñas que un grano de sal, servirá como huella digital o anclaje criptográfico, se integrarán en los objetos y dispositivos cotidianos. Se usarán en conjunto con la tecnología de contabilidad distribuida de Blockchain para garantizar la autenticidad de cualquier objeto desde su origen hasta llegar a las manos del cliente. En pocas palabras, representa la evolución del código de barras.
Su principal campo de acción, será en seguridad alimentaria, la autenticidad de los componentes fabricados, los productos genéticamente modificados, la identificación de objetos falsificados y la procedencia de los artículos de lujo.