La lucha por nuestra privacidad vive momentos clave.
Y es que mientras en Estados Unidos, Apple y el FBI mantienen una confrontación abierta sobre si la compañía debe desarrollar un sistema que permita a las autoridades norteamericanas acceder a los datos que resguardamos en nuestros dispositivos móviles, en Brasil, se anuncia la detención del vicepresidente de Facebook, Instagram y Whatsapp para América Latina, el argentino Diego Dzodan, por negarse a revelar a la justicia de dicho país información relacionada con usuarios de estas plataformas y que están siendo investigados por la policía brasileña.
“Esta detención fue realizada por la Policía Federal del Estado de Sergipe, teniendo en cuenta la falta sistemática del cumplimiento de las órdenes judiciales en investigaciones secretas, relacionadas con el crimen organizado y el tráfico de drogas” anuncia el comunicado de la Policia Federal de Brasil, en donde se confirma la detención de Dzodan, ocurrida en su domicilio ubicado en el barrio de Itaim en Sao Paulo.
¿Los motivos? Son simples, pues Facebook se ha negado a proporcionar una serie de mensajes supuestamente intercambiados por algunos de sus usuarios que podrían estar relacionados con una investigación sobre narcotráfico que realiza la policía brasileña.
“”Estamos decepcionados con la medida extrema y desproporcionada de detener a un ejecutivo de Facebook, escoltado hasta la comisaría debido a un caso que involucra a WhatsApp, que opera separadamente de Facebook. Facebook siempre estuvo y siempre estará disponible para responder a los cuestionamientos que las autoridades brasileñas puedan tener” ha la compañía en un comunicado.
Esta no es la primera vez que la justicia brasileña intenta presionar a Whatsapp para que ceda en sus intentos de mantener nuestra privacidad segura, pues recordemos que en Diciembre, un juez ordenó la suspensión provisional del servicio en todo Brasil por una situación similar.
Lo que es un hecho, es que el debate sobre nuestros derechos a la privacidad, y la seguridad nacional parece estar sobre la mesa, no sólo en Estados Unidos, sino también en Brasil y seguramente pronto podría llegar a nuestro país, por lo que habremos de estar atentos para saber cuáles son las propuestas y posibles soluciones a un tema tan importante como delicado.