Desde que el ser humano hace uso de razón, se ha visto inmerso en la casi interminable tarea de revelar los misterios que guarda este mundo. Lo cierto es que se han descubierto muchas maravillas desde entonces, pero conforme pasa el tiempo, nos damos cuenta de que aún queda un largo camino por recorrer.

Muy a menudo sucede que se hacen hallazgos tan enigmáticos que nos dejan con más preguntas que con las que iniciamos. Uno de estos es el que se hizo hace poco más de treinta años en Japón, cuando unos buceadores que tan sólo buscaban un buen lugar para admirar tiburones martillo, terminaron encontrando unas enormes ruinas sumergidas en las profundidades del océano.

Esta misteriosa estructura es ahora conocida como el Monumento Yonaguni, un monolito que probablemente lleva existiendo desde las eras glaciales y cuyas formas parecen haber sido talladas por la mano humana. Pero el dato curioso no termina ahí, porque hasta la actualidad, sigue sin determinarse si realmente hubo intervención del hombre, o si este se creó de forma natural.

¿Quién sabe? Se pudo obtener ayuda externa…

En fin, por un lado tenemos al profesor de ciencias Masaaki Kimura, quien trabaja en la Universidad de Rykukyus, en Okinawa. Él dice que estas ruinas son obviamente obra de una civilización antigua. Durante una excursión a la isla Yonaguni, el estudioso destacó que se han encontrado rastros de pequeños campamentos, así como herramientas básicas para la vida que datan del año 2,500 a.C. Eso sí, no asegura que en aquel entonces se tuvieran conocimientos suficientes para crear monolitos.

La teoría también supone que Yonaguni es parte de la civilización Mu, cuya suerte fue muy similar a la de la Atlántida o Thule.

Mientras tanto, el geólogo Robert Schoch piensa que la estructura es totalmente natural, ya que, de haber sido creada por el ser humano, tendría que haber sido construida sobre el mar. Según sus palabras, eso no podría ser posible porque significaría que el monumento tiene más de 8,000 años de antigüedad y existe desde antes de la era de hielo.

Hasta ahora, nadie tiene una respuesta acertada de lo que realmente fue este monumento. Nosotros pensamos que en la antigüedad, la humanidad no tenía las capacidades de crear estructuras parecidas y que por lo tanto, todo debe ser obra de aliens. Es la explicación más lógica, ¿no creen?

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