La vida de un repartidor de pizza parece simple, andan en la calle, tienen pizza a la mano y además les pagan, pero lo cierto es que también es un trabajo al que muchos jóvenes recurren cuando no tienen una mejor alternativa, como fue el caso de Jeff Louis, originario de la ciudad de Mentor, Ohio.
Jeff ha batallado durante un tiempo contra su adicción a las drogas, y ahora ha querido dejar eso atrás y enfocarse en su trabajo como repartidor de pizza. Para motivarlo a que siga por este camino, el pastor de la iglesia de Life Point, decidió realizar una buena acción para este muchacho. En un día de trabajo normal, Jeff tuvo que entregar varias órdenes desde temprano, y cual fue su sorpresa que al entregar la pizza que era para la mencionada iglesia, recibió una propina de 100 dólares.
Pero la cosa no terminó ahí, ya que otros miembros de esta congregación decidieron también darle una pequeña ayuda y el joven de 22 años terminó reuniendo 700 dólares. Esta noble acción, conmovió tanto al buen Jeff que decidió grabar un video donde se le ve completamente emocionado y agradecido, donde asegura que le dará un buen uso a este dinero. No cabe duda que con acciones desinteresadas como esta, parece que aún podemos tener fe en la humanidad.