Al hablar de nuestra salud con alguien conocido, muchas veces escuchamos la típica frase, “De algo me tengo que morir”, pero si nos detenemos a pensar seriamente, esas simples palabras podrían representar hechos futuros en casos extremos.
En los últimos temas de salud, un nuevo documental sugiere que los cambios en la bacteria estomacal benigna, no son sólo presentados por obesidad, pero no deja de ser una causa.
El documental conocido como The Diet Myth, por el profesor Tim Spector, explica que las dietas usadas por la sociedad moderna han estado destruyendo bacterias benignas en nuestro organismo, debido al desarrollo de ciertos antibióticos que se encuentran en los alimentos por las medidas modernas de limpieza usadas para su distribución.
Spector realiza un experimento en este documental, en el cual le pide a su hijo, Tom, que sólo coma alimentos chatarra por 10 días. Obviamente, el niño estaba muy contento, como cualquiera de nosotros si nos pidieran comer puras papas y Gansitos.
Con el paso del tiempo, las cosas ya no fueron tan lindas para el chavito y claro, esto debido a que un 40% de los microbios en su organismo habían sido destruidos. El pequeño Tom, incluso dijo lo siguiente:
“Para el cuarto día, describo mi estado como una resaca después de cada comida.”
Según lo que dice el profesor, estas especies de microbios y bacterias benignas son esenciales para el cuerpo, ya que son responsables de producir vitaminas y nutrientes que ayudan a mantener la salud en el organismo. Sin estas, todo en nuestro cuerpo comienza a decaer rápidamente.
Un dato increíble que tenemos que tomar en cuenta, es que después de finalizar el experimento, la recuperación de las bacterias no se dio tan rápido como al momento de perderlas; esto fue lo que el profesor dijo al respecto:
“Otra sorpresa que tuve fue que dos semanas después del experimento, comenzamos a comer frutas y vegetales. Pero los microbios benignos no se habían recuperado siquiera en un 50%.
Entre más sano sea nuestro sistema inmune, hay menos casos de obesidad.”
El aumento del uso de antibióticos afecta mucho nuestro interior, sobre todo a temprana edad. Por eso es importante saber que las dietas no funcionan correctamente, si no tenemos una cantidad suficiente de microbios benignos para regular y aprovechar la comida que llega a nuestro cuerpo.
“Los antibióticos hacen que todos los animales de granja ganen peso y producen una comunidad menor de microbios. Lo mismo ocurre con los humanos con el uso directo de antibióticos, mediante la ingesta de pequeñas dosis encontradas en ciertos tipos de carne.”
Si quieren tratar de reparar el daño que han creado con el tiempo, no se preocupen, porque es posible. Los probióticos encontrados en el yogurt, hortalizas, semillas y alimentos con alto nivel de fibra, pueden ayudarlos a recuperar microbios buenos.
Así que ya saben, traten de variar un poco a la alimentación, porque no todas las bacterias son malas y no todo antibiótico es totalmente beneficioso; bájenle a la comida chatarra, por más deliciosa y atractiva que sea.
Vía independent