A pesar de lo que puedan pensar del Día del Amor y la Amistad (que es una fecha creada por las corporaciones para sacarnos dinero), la historia no nos miente y nos asegura que esta fecha tiene siglos de existencia.

Mientras que a nosotros nos dicen que “luchemos con capucha” este 14 de febrero, los antiguos romanos hacían todo lo contrario y le daban duro al arrumaco.

Orgías romanas

El origen de esta fiesta está muy lejos de lo que conocemos hoy en día, ya que en vez de entregar dulces y flores; los latigazos con piel ensangrentada de cabras eran la forma de celebrar.

Muchos historiadores encuentran el origen de esta fecha en la celebración romana llamada Lupercalia, la cual se llevaba a cabo del 13 al 15 de febrero.

Mientras que nosotros dedicamos este día al amor fraternal, los romanos celebraban la fertilidad en un ritual muy peculiar. Todo comenzaba cuando un grupo selecto de sacerdotes que se hacían llamar Lupercos, se congregaban en una gruta del monte Palatino donde se encontraba el árbol consagrado a la diosa Rumina.

Allí, comenzaban las festividades inmolando a una cabra…

Acto seguido, uno de los sacerdotes marcaba a los demás con el cuchillo ensangrentado, limpiando la mancha con un mechón de lana bañado en leche de cabra.

Terminando este descabellado ritual, los sacerdotes comenzaban a reírse cuales quinceañeras y tomaban varias tiras de la piel de la cabra sacrificada y es aquí cuando las cosas se empiezan a poner bien locas.

Saliendo disparados, los desnudos sacerdotes comenzaban una procesión en donde cada mujer que se ponía en su camino, recibía un azote del sanguinolento pedazo de carne. No se confundan, todas las mujeres salían a la espera de los sacerdotes, ya que este ritual era considerado como una purificación para celebrar la fertilidad.

Lupercalia

Y si esto no les parece lo suficientemente loco, en pleno apogeo de la Lupercalia, en un tarro se ponían todos los nombres de las mujeres. Luego, como vil tómbola, cada uno sacaría un nombre y de ahí, las parejas podrían tener sexo durante el tiempo que durarán las festividades…

Esto llevaba a una serie de orgías que hacen que Calígula parezca una película para niños:

No sería hasta que el Papa Gelasius I, prohibió la Lupercalia e instauró el 14 de febrero como el día de la fiesta de San Valentín.

Hasta la fecha no hay una razón clara de quién fue San Valentín, pero se especula que pudieron ser dos hombres que el emperador Claudio II ejecutó en diferentes años del siglo III a.D.

Con el pasar de los siglos, esta fecha comenzó a ganar connotaciones más románticas, siendo escritores como Shakespeare y Geoffrey Chaucer quienes le brindaron del aura amorosa que conocemos hoy en día.

Shakespeare

En fin, a pesar de que ya no sacrificamos cabras o utilizamos pedazos de piel ensangrentada para marcar a nuestra pareja; no se puede negar que muchos siguen utilizando este día como excusa para darse amor más que fraternal.

Todo lo que no sabías que necesitas saber lo encuentras en Sopitas.com

Comentarios

Comenta con tu cuenta de Facebook