Ir a un parque de diversiones puede ser una de las mejores experiencias de tu vida, si te gustan los juegos mecánicos, hacer filas de hora, sufrir mareos y tal vez vomito y uno que otro golpe al rebotar en una montaña rusa. Y si no te gustan, mejor ni te pares, porque te la puedes pasar fatal vomitando las palomitas que te empacaste hace una hora.
Estamos acostumbrados a que estos lugares estén en lugares al aire libre y en terrenos enormes, sin embargo, existe un parque de estos en Rumania que se encuentra en una mina de sal que data de 1932 y que en 1992 fue convertido en parque de diversiones.
El lugar se llama Salina Turda y se encuentra aproximadamente 120 metros de profundidad, con varios niveles, con las tracciones clásicas: un anfiteatro, un mini golf, mesas de ping pong, canchas de basketball, para jugar boliche, un carrusel y una rueda de la fortuna.
También pueden ir a remar a un lago, admirar las estalactitas o irse al spa, diseñado gracias a los 54 grados de la caverna y el 80% de humedad que hay.
Aquí una especie de recorrido virtual, para que vean lo impresionante que es la caverna:
Así que sí están planeando sus próximas vacaciones por Europa del Este, esta definitivamente tiene que ser una parada, es una visita diferente, sin montañas rusas y se la van a pasar mejor que Ben Affleck en Disney.
***vía: Mental floss