Sin aguantarse a que llegaran los refuerzos, la prensa o a que Sting le compusiera una canción, el diputado de Morena, Julián Peña Hidalgo, se aventó a salvar a su fiel perro que accidentalmente cayó en un pozo. Su no bien pensado plan: evitar que el can se cansara de nadar y únicamente hacerle inútil compañía en lo que llegaban sus familiares por ellos.
Evidentemente el morenista no le midió bien el agua a los camotes. A los pocos minutos de estar con su mascota en el encierro acuático, se dio cuenta que no estaba tan papita eso de estar esperando dentro del agua y cargando a un perro, por lo que decidió salir por cuenta propia. Sin cuerdas, escalera, lámpara, salvavidas… pero sí con celular, el legislador fue blanco de cábula al transmitir por Facebook Live su lamentable condición.
El perro no, él qué culpa tiene de semejante dueño….
“Voy a intentar subir yo sólo, ya avisé a mi familia, pero voy a intentar subir”, avisó el buen Julián… pero nomás se quedó en las palabras, ya que sus fuerzas no le daban para subir por las varillas instaladas dentro del pozo.
¿Y por qué no intentó aventar al perro o dejarlo un rato en lo que iba por una escalera o por alguien que le echara la mano con el celular (digo, para que usara las dos manos, en lugar de estar con el pin%&e teléfono causando lastimas)? Quién sabe, lo que sí sabemos es que la transmisión le sirvió para solicitar auxilio a los cibernautas. “Les voy a pedir que nos hagan el favor, pero si está cansado esto porque no puedo subir”.
También sabemos que hay buena señal en la comunidad de San Juan Calmeca, en el municipio de Tepexco, Puebla, que es donde ocurrió el incidente. Luego de 30 minutos de estar en el pozo de 12 metros de profundidad, el animal y su dueño (ahí ustedes decidan cuál es cuál) fueron rescatados.