Cualquiera que tenga un gato sabe que cuando quiere que les hagas caso, encontrará una de las cien maneras diferentes que tienen para conseguir lo que quieren, y vaya que se ponen celosos si piensan que no le estás dando su merecida la atención que merecen. Un minino travieso encontró una manera poderosa de llamar la atención de su dueño: destrozó una gran figura de Doraemon de 2 mil 432 piezas.
Esta historia ocurrió en Tailandia y la pobre víctima de la ira de este gato fue un joven trabajador de una tienda de juguetes en la capital del país, Bangkok. Más allá de su labor atendiendo y vendiendo a todos los pequeños (y no tanto) y porque ama lo que hace, este hombre a petición de un cliente decidió ayudarlo con la tarea de armar una enorme figura del popular personaje japonés, así que se lo llevó a casa para dedicarle el tiempo que merecía con tal de acabarlo antes de Año Nuevo.
Con lo que no contaba era que su gato le iba a arruinar sus planes y echaría todo su esfuerzo a la basura. Después de pasar una semana entera desvelándose para que quedara lo antes posible, pero el minino sintió que su dueño de plano no lo pelaba así que seguramente se le ocurrió que era una gran idea tirar la pequeña pieza y de esa manera llamar la atención, pero lo que consiguió fue un enorme castigo.
A través de redes sociales se hizo conocida la historia de este gatito y su joven dueño, quien con un poquito de frustración compartió lo que había pasado en su cuenta de Facebook, donde vemos a su mascota con cara de ‘yo no fui’. Y es que hay que aceptarlo, a pesar de que destrozó al pobre Doraemon, podemos casi asegurar que al ver la carita tierna del gato, todo el coraje se le fue –o eso esperamos que haya pasado–. Si no nos creen, chequen a continuación las imágenes:
Al final no supimos si el hombre pudo volver a armarlo y entregarlo a tiempo, pero el gato se salió con la suya, consiguió que su dueño le hiciera caso y en el intento hasta se volvió viral. Hazte a un lado Doraemon, que este gatito te robó toda la atención.
