Son muchas las historias de mujeres ingratas que dejan a los pobres hombres, sólo porque estos dedican, no sé… 10 de las 24 horas del día a placeres como ver deportes en TV, porno en internet e irse a chupar con los cuates (muchos hacen las tres cosas a la vez).
Aún no conseguimos investigar por qué la dama en cuestión abandonó a este australiano, pero rápido encontró suplente y bueno, el héroe de esta historia en vez de exigir una satisfacción, descargó su enojó contra el auto del rival amoroso…
“¡Mira como me vengo!”, dicen que fueron las palabras del sujeto mientras estaba arriba de los autos.
Para completar la historia, el de Australia tomó una foto más en el interior de la patrulla.
*Vía O Globo