Cuando un coche atropella a una persona, casi de forma automática solemos echarle la culpa al conductor del auto, más aún si el atropellado es un niño.
Pero saben, a veces la culpa no es de los conductores, sino de los papás que descuidan a sus hijos cuando están cerca de alguna calle o avenida. Así lo demuestra este video que recopila varias escenas captadas por las cámaras de seguridad de algunos autos en Rusia, y donde afortunadamente no ocurrieron accidentes fatales gracias a la pericia y rápida reacción de los conductores… o al destino.
Todas las escenas tienen como común denominador la irresponsabilidad y poco cuidado de algunas mamás con sus hijos:
Este video ha sido difundido para educar a la población rusa, tanto a conductores como a peatones, sobre la importancia de tener cuidado al manejar y caminar por las calles.
Como dice la canción del Haragán: Padres, cuiden a sus hijos…