Un pueblito en España ganó la Lotería y ahora es una guerra de vecinos: ¿Ustedes qué harían?

Una de las historias más locas de este 2025 empezó como una noticia increíble, pero poco a poco se convirtió en una maldición. Y todo comienza con un pueblito en España que se ganó la Lotería.

Sin embargo —cochino dinero, decía mi abuela—, los errores administrativos, las acusaciones de fraude y los pleitos entre amigos de toda la vida han provocado un caos. Ahora todos desconfían, están llenos de amenazas de demandas y por supuesto, millones de euros están en medio de una guerra de vecinos.

Villamanín se ganó la Lotería en España

Antes de que todo se fuera al traste, les juro que esta era una historia bonita. Villamanín es un pueblito en España de 863 habitantes que ha intentado mantener la tradición de celebrar las fiestas de fin de año.

15 jóvenes voluntarios, todos menores de 25 años, estaban a cargo de la Comisión de Fiestas.

Para financiar la pachanga —como lo hacen cada año desde 2018— hicieron una colecta vendiendo una planilla de 450 boletos de la Lotería del Gordo de Navidad.

La dinámica era completamente simple. Cada boleto en Villamanín costaba 5 euros: 4 estaban destinados al boleto de Lotería y el quinto euro se lo quedaba la Comisión para financiar las fiestas de este pueblito en España.

Y el 22 de diciembre les llegó la noticia más loca de sus vidas. Su número, el 79432, se había ganado la Lotería del Gordo de Navidad.

Celebraciones al aire, gritos, festejos y un golpe de suerte para este pueblito en España en la que cada una de las 450 personas que había comprado un boleto de Lotería le tocaban cerca de 80 mil euros de premio. Imagínense cómo estaba Villamanín.

Hasta que se dieron cuenta que la Comisión de Fiestas había cometido un error.

El gran error que rompió a un pueblo

De acuerdo con sus propios testimonios —varios vecinos no les creen—, uno de los jóvenes voluntarios de la Comisión de Fiestas cometió un error al registrar los boletos de Lotería pues olvidó 50 boletos en su casa.

Esto quiere decir que solo tienen 400 boletos ganadores, pero 450 personas exigiendo su premio. Millones de euros en el aire.

Entre el caos por el dinero incierto, las fiestas de fin de año en Villamanín se cancelaron. Los jóvenes voluntarios están acusados de fraude, mientras que los habitantes del pueblo de 863 personas están en una guerra para intentar llegar a un acuerdo con su premio de Lotería.

Caos total en el que todo el pueblo se odia —o mínimo, ahora desconfían de sus vecinos de toda la vida.

Un acuerdo: ¿Ustedes qué harían?

Con las malas noticias en la mano, la Comisión de Fiestas convocó a las 450 personas con boletos a una reunión a puerta cerrada en el bar de este pueblito de España con la misión de encontrar una solución civilizada.

El País reporta que fueron 4 horas de tensiones en aumento. Una reunión de gritos, sombrerazos y votaciones para llegar a un consenso. Hubo llantos, gritos y reclamos legales, pero este fue el acuerdo:

Cada uno de los 400 boletos ganadores se compromete a dejar 5% de su premio para completar los premios de los 50 boletos faltantes. Eso quiere decir que los ganadores ya no se llevan 80 mil euros, sino 76 mil euros.

Mientras tanto, los 15 voluntarios de la Comisión de Fiestas se comprometieron a no recibir ni un centavo de sus propios boletos, como un gesto de buena fe.

El acuerdo se puede romper fácilmente

“Hasta para los más optimistas del pueblo”, comenta El País, este acuerdo puede salir mal.

Y es que se alcanzó con una votación a mano alzada, con muchos vecinos en desacuerdo. Nada quedó por escrito y no fue unánime. Y por supuesto, el acuerdo de este pueblito que ganó la Lotería en España depende completamente de dos cuestiones importantísimas:

• La gente tiene que regresar el 5% de su dinero de manera voluntaria. No tienen ninguna obligación legal, o sea que, recogen su premio individualmente y lo regresan a la Comisión de Fiestas de buena fe, para repartirlo entre sus vecinos faltantes.
• Nadie puede demandar a la Comisión de Fiestas, pues corren el riesgo de que, entrando en asuntos legales con jueces y acusaciones de fraude, nadie en el pueblo pueda cobrar su premio.

Entonces, así es como está la discusión en Villamanín. Solo imagínenselo:

A la distancia, suena sencillo dejar 4 mil euros para ganar 76 mil; pero dependen de la confianza. Si uno solo de los vecinos no regresa el dinero, le desacompleta el premio a otro.

O si una vecina demanda para recibir su premio completo, corre el riesgo de dejar a todos sin dinero.

Y los ánimos en el pueblito de España están —como dicen por allá— caldeados. ¿Ustedes qué harían? ¿Confiarían en sus vecinos o regresarían parte de su premio? ¿Se sentirían estafados y buscarían el premio completo? ¿Cobran todo y se mudan?

“Queremos que Villamanín sea recordado por el pueblo que le tocó el Gordo, no por el pueblo que se dividió porque tocó el Gordo”, comenta un joven de la Comisión, pero ese tren ya pasó hace varios días.