Por: Encarni Remolina
Basado en la famosa frase de Jacques Custeau que dice que “nadie conserva lo que no ama y nadie ama lo que no conoce”, el Doctor Jesús Estudillo (qepd), Médico Veterinario Zootecnista de la UNAM con maestría en patología aviar de la Universidad de Ohio decidió crear un santuario de conservación para especies en peligro de extinción cerca del área urbana de la Ciudad de México. Un sitio en el que aves y otras especies que estaban destinadas a desaparecer pudieran vivir y reproducirse. El Nido, un lugar sin ánimos de lucro en donde también los humanos pudiéramos aprender de estas especies y visitar este maravilloso oasis que nació del estudio, la dedicación y el amor por las aves y la naturaleza a tan solo 20 minutos de la capital del país, en Ixtapaluca.
El Nido nació como una rama abierta al público de Vida Silvestre, institución madre del Doctor Jesús Estudillo que por más de 50 años se ha dedicado a la conservación de especies. Durante todos estos años, investigadores, académicos, veterinarios y científicos, han visto este proyecto crecer y dar frutos tan importantes como la reproducción en cautiverio por primera vez en el mundo de especies altamente amenazadas como el quetzal. Hoy el Nido es el aviario más grande de América Latina y el tercero en el mundo con sus más de 300 especies de aves la mayoría de ellas en peligro de extinción.
Sin embargo, hoy, El Nido al igual que muchos otros negocios y organizaciones no gubernamentales en el país se encuentra en peligro. Las 7 hectáreas que se encuentran divididas en 4 microsistemas, selva, bosque, desierto y pastizal, tras años de cuidado y esfuerzo hoy son hábitat de cientos de especies como el jaguar que se mantienen con donativos y con lo que se recauda de visitas escolares organizadas para cada nivel, que por ahora, y debido a la emergencia de salud que estamos viviendo, no se llevarán a cabo.
Es por esto que lanzaron una campaña pidiendo nuestro apoyo para poder mantener este espacio sagrado para tantas especies durante estos meses.
Por todos los estudiantes de todas las edades que han pasado por El Nido, y esperando que muchas más generaciones en un futuro puedan seguir visitándolo, podemos ahora cooperar y poner un granito de arena para el mantenimiento del espacio y el alimento que todas estas especies suponen. Con 350 pesos puedes adoptar y mantener un ave durante un mes, y si en tus posibilidades está el apoyar con más, aquí está la lista de apoyos.
El Doctor Jesús Estudillo ya no se encuentra con nosotros, pero su sueño y sus logros siguen vivos en El Nido, ahora a a cargo de su hijo y también en otras de las más importantes instituciones para la protección del medio ambiente en México como Pronatura y Naturalia de las cuales también fue fundador.
En 1993 la ONU le concedió el premio Global 500, el más importante del programa de las Naciones Unidas para el medio ambiente, mismo que ganó Jaques Cousteo y Chico Mendes.
La gran labor que el Doctor Estudillo hizo y que su legado sigue haciendo por conservar la biodiversidad tan amplia que tenemos en México y por compartir el conocimiento y la importancia del cuidado a nuestro medio ambiente es digna de admiración y hoy tenemos una forma de agradecer lo que personas dedicadas, y llenas de amor y respeto por nuestra naturaleza, han hecho por todos nosotros y por nuestro futuro.