Muchos Godínez estarán de acuerdo en que el trabajo exige mucho de uno, especialmente si es un trabajo que odian y seguro muchas veces han pensado en renunciar o, simplemente, huir de sus empleos, hasta que piensan en que tienen que comer y vuelven a su realidad.
Sin embargo, un hombre de 69 años llamado Joaquín García decidió que, simplemente, iba a tomarse unos días libres de su trabajo… y esos días libres acabaron siendo 6 años.
García se encargaba de supervisar el edificio de una planta para el tratamiento de residuos en el agua. No era un gran fan de lo que hacía así que comenzó a faltar, sin que nadie se diera cuenta de su ausencia. Debido a eso, García seguía ganando 37 mil euros al año. Nada mal, especialmente por no hacer nada.
Todo iba bien hasta que, debido a sus 20 años de servicio en el lugar donde trabajaba, pensaban darle un premio; sin embargo, al tratar de localizarlo para darle su reconocimiento, se dieron cuenta de que el hombre simplemente no había estado yendo a trabajar por varios años.
Por supuesto, esto no pasó de noche y García fue multado por la cantidad de 27 mil euros debido a su larga ausencia.
García ha negado las acusaciones y, de hecho, dice que sí iba a su trabajo, solo que simplemente no había nada que hacer por lo que se le hacía fácil regresarse a su casa.
Al preguntársele sobre porqué no había reportado su situación, García mencionó que tenía una familia que mantener y temía que sería difícil encontrar otro trabajo, así que comenzó a leer mucho y se volvió experto en el filósofo Spinoza aunque no sabemos como le ayudaría eso a encontrar otro trabajo.
Obviamente esta situación merecía su despido pero García es un hombre astuto y no pudieron hacer tal cosa porque ya se había retirado.
Y esa es la historia de Joaquín García. ¿Héroe? ¿Villano? ¿Un poco de ambos? Juzguen ustedes mismos.