¡Vaya que se han pasado rápido los primeros cuatro meses del gobierno de Donald Trump! Mientras que muchos predecían el fin del mundo, salvo por una que otra decisión, la Naranja Humana ha sido más un chiste que una amenaza.
Sobre todo para las celebridades que lo han agarrado como pera de boxeo. Pero nadie como Stephen King, quien se ha encargado de hacerle la vida imposible en redes sociales, usando sus increíbles habilidades como narrador y su muy peculiar sentido del humor:
After listening to Comey today and Trump for last 4 and a half months, I have a clear opinion on which one is the actual “nut job.”
— Stephen King (@StephenKing) June 8, 2017
“Después de haber escuchado a Comey el día de hoy y ha Trump por los últimos cuatro meses, ya tengo una opinión muy clara sobre quien está realmente loco.
Desde la familia de Trump, hasta los miembros de su gabinete, nadie se salva ante la implacable furia de King.
Trump’s cabinet offers a postgraduate-level course in ass-kissing.
— Stephen King (@StephenKing) June 13, 2017
“El gabinete de Trump ofrece un postgrado sobre como besar el trasero.
Sin embargo, parece ser que Donald ya se cansó de tanto abuso a su persona (vaya ironía), tanto así que ha bloqueado al proveniente del estado maldito de Maine:
Trump has blocked me from reading his tweets. I may have to kill myself.
— Stephen King (@StephenKing) June 13, 2017
“Trump me ha bloqueado de poder leer sus tuits. Tal vez tendré que suicidarme.
Obviamente, esto ha causado una serie de reacciones, pero la que más ha llamado la atención, fue la respuesta de otra escritora famosa:
I still have access. I’ll DM them to you. https://t.co/MhibEYDBTg
— J.K. Rowling (@jk_rowling) June 13, 2017
“Yo todavía tengo acceso. Se los pasaré a tu nombre.
Mostrando completa solidaridad con su camarada escritor, Rowling le promete a King que ella se hará cargo de hacerle llegar sus mensajes.
Y bueno, ¿qué más podemos decir?, la guerra entre Trump y los famosos del mundo, continuará. Y si realmente el asunto con Rusia es verdad, no nos queremos imaginar la lluvia de comentarios que le caerán encima.