Como sabemos, China, el país más poblado del mundo sufre un serio problema de contaminación y es que con solo ver algunas imágenes sirve para ponernos la piel de gallina:
Y no solo China tiene estos problemas, nosotros en México sufrimos del mismo mal (no a tales extremos por supuesto). Obviamente todo esto nos hace apreciar aunque sea un mínimo respiro de aire fresco. Es por eso que este pequeño negocio inglés, se ha dedicado a vender aire fresco embotellado:
Aethaer, que se traduce del Griego “Aire Fresco”, es una empresa británica, perteneciente a Leo De Watts, que al ver los problemas de contaminación que padece el mundo, tuvo una idea ganadora. Junto a familiares y amigos, viajan a los parajes más remotos de la provincia, donde el smog y la contaminación no existen.
Ya estando en el lugar apropiado, utilizando redes de pesca, se disponen a atrapar el prístino aire, el cual luego embotellan en contenedores, los cuales se llegan a vender en hasta 80 libras (2 mil 141 pesos).
Nada mejor que el fruto de un trabajo bien hecho.
Como podrán notar el precio es bastante alto, sobre todo si tomamos en cuenta que el gusto dura apenas unos cuantos segundos.
Entre sus productos se encuentra aire traído de Dorset, Somerset, Gales, Wilshire y Yorkshire. Leo asegura que cada región tiene su propio aroma, como aquí, vayan por la central de abasto y dígannos si mentimos.
Pero al parecer, los chinos no solamente compran estos frascos para conseguir aire fresco. Ya que también compran este curioso producto para regalarlo y dejarlo sin abrir, ¿que mejor detalle que tener aire embotellado?
Y vaya que no son humildes acerca de la calidad de su producto, oh no, en palabras del propio Leo:
“Nuestro producto es el equivalente al Gucci y Louis Vuitton de la industria del aire fresco.”
Acerca del elevado precio, esto es lo que tienen que decir:
“Nosotros nos vendemos como un producto de lujo (no es para cualquier persona). Si ellos quieren algo más barato, son libres de comprarlo.”
Uy, uy, uy; perdón señor emprendedor, discúlpenos por no ser lo suficientemente dignos de comprar su producto.
En fin, si ustedes quieren comprarles un frasco del mejor aire inglés, pueden hacerlo visitando su página de internet.