¿Aburridos de que les lean el tarot en cartas o que les digan su futuro viendo sus manos? Entonces deberían probar una opción diferente. No queremos incomodar a nadie, pero sabemos de un grupo de personas que aceptarían una moneda por mirar sus traseros y decirles cómo va todo en su vida, así como lo que les depara más adelante… o atrás.
Posiblemente piensen que es una broma, pero los rumpólogos son reales y creen fervientemente que los músculos en los glúteos son como mapas; unos que guardan todos los secretos la existencia de cada persona. Cada protuberancia, verruga, lunar, arruga, grieta o estría es importante, ya que para estos “videntes”, poseen más información espiritual de las personas que cualquier otra parte del cuerpo.
Y decían que los ojos eran la ventana al alma, lol.
Si tomamos en cuenta lo que dicen las enseñanzas del viejo arte de leer las posaderas -que según la historia, datan desde la antigua Babilonia-, la nalga izquierda representa el hemisferio derecho del cerebro, donde se pueden ver el pasado de la persona y la trayectoria de su vida. En cuanto a la nacha derecha, esta contiene los enigmas que están por venir.
La conjunción de ambas revela detalles de la personalidad. Si se tiene un trasero con forma de manzana, entonces ahí existe una personalidad carismática y creativa; si parece más una pera, se habla de carácter firme y paciente; la redondez delata optimismo y alegría. Obviamente hay más variaciones, pero es cuestión de hacer estudios a mayor profundidad y creemos que no es el momento adecuado.
Se sabe que alrededor del mundo, existen expertos de fama internacional. La que más destaca a nivel mediático es Jacqueline Stallone, la madre de Sylvester, el conocido actor que interpretó a personajes como Rocky Balboa o John Rambo. Esta señora se ha dedicado a compartir sus técnicas de rumpología con todo el público, asegurando al mismo tiempo que la práctica no es ningún juego.
Ahora que conocen el peculiar método para ver hacia su futuro y revelar la verdadera personalidad de la gente, sólo podemos aconsejarles que visiten a verdaderos especialistas de la materia. No queremos que en el futuro surjan casos de estafas y personas decepcionadas, que nada más fueron a enseñar las pompas en vano.