Nunca esperamos nada de ellos y aún así logran decepcionarnos… Los influencers son personas que están dispuestas a todo con tal de ser cool y hacerse notar, de eso ya no nos queda duda alguna. Sin embargo, es muy preocupante los límites a los que llegan con tal de cumplir su propósito de obtener likes, followers y demás cosas a manos llenas.
Ya sea subir fotos fuera de contexto, dañar estatuas o grabarse haciendo cosas estúpidas, a estas alturas de la vida ya podemos esperar cualquier cosa de un influencer. Una vez más, ese pensamiento ha quedado reafirmado gracias a Amber Luke, una chica que en afán de seguir siendo reconocida en redes sociales por su adicción a los tatuajes, se tatuó los ojos de color azul y se quedó ciega durante varias semanas.
Amber Luke, quiene es famosa en Nueva Gales del Sur, Australia, compartió a través de sus redes sociales que se había sometido a un procedimiento para teñirse los ojos de color azul, el cual duró aproximadamente 40 minutos y que fue demasiado doloroso: “Ni siquiera puedo comenzar a describir cómo era la sensación, lo mejor que puedo darle es que una vez que el globo ocular fue penetrado con la tinta, sentí que agarraron 10 fragmentos de vidrio y lo frotaron en mis ojos”, comentó.
La chica, quien se hace llamar Blue Eyes White Dragon (Dragón Blanco de Ojos Azules, igual que el personaje de Yu-Gi-Oh!), comentó que durante el proceso su tatuador se metió demasiado en sus globos oculares, por lo que perdió la vista durante tres semanas: “Si su procedimiento se realiza correctamente, se supone que no debe quedar ciego en absoluto”.
A pesar del mal rato que Luke vivió en su afán de tener los ojos azules, la chica también reafirmó que su adicción a los tatuajes es mayor que cualquier cosa y no se arrepiente de lo que hizo. Es más, para 2020 espera tener el cuerpo repleto de tatuajes, los cuales hasta el momento suman 200 de ellos en su piel, de acuerdo con información del Daily Mail.
Ni hablar, cada quien sus cubas pero la neta es que eso de tatuarse los ojos nomás no suena algo que se nos antojaría hacer un día de ocio. ¿O ustedes sí se atreverían?
