¿Cómo? ¿Scott Weiland arrestado por posesión de drogas otra vez? ¡PFFT! Eso no es noticia. Y tal parece que eso fue lo que ocurrió en Beverly Hills hace un mes cuando el ex-vocalista de STP fue perseguido por un guardia de seguridad mientras huía de una tienda por robarse navajas de afeitar. No, en serio.
Cuando fue agarrado por las fuerzas de la ley y el orden, la policía descubrió que tenía metanfetaminas por lo que además fue arrestado por posesión de narcóticos. El sujeto trató de zafarse de los oficiales al decir, “¡Soy Scott Weiland de los Stone Temple Pilots!”, lo cual no es una idea muy brillante si lo piensas dos veces.
Ya que verás… si eres un policía de Los Ángeles y arrestas a un junkie que anda vagando por la calle, es natural que lo primero que venga a su mente sea “Mira, es Scott Weiland”. Pero si la persona arrestada te dice que de hecho su nombre es Scott Weiland, ¿para qué dudar su palabra? Así que bajo esta asunción, los oficiales del condado de Los Ángeles pensaron por cuatro semanas que tenían detrás de sus barras al también cantante de Velvet Revolver, sin poder pagar la fianza de $95,000 dólares.
La semana pasada, TMZ publicó la noticia sobre cómo Weiland fue a parar en la cárcel una vez más. Nada fuera de lo común para los editores del sitio de farándula. Pero imagina su sorpresa cuando al poco tiempo, OTRO sujeto que se hacía llamar Scott Weiland publicó un video en su cuenta oficial de Facebook en el que vemos al artista en un estudio de grabación de Los Ángeles con su banda. Weiland desmintió la noticia de TMZ y, de paso, promovió su siguiente lanzamiento como solista.
Mmm…
TMZ, reconocido bastión del periodismo, se puso a investigar al respecto y contactó al sheriff, pero la policía estaba totalmente convencida de haber arrestado a la estrella de rock. Incluso le hicieron una “prueba física” y eso confirmaba que lo tenían “definitivamente bajo custodia”.
Sin embargo, ayer por la noche, la policía contactó a TMZ para admitir su tremendo error. Resulta que el sujeto arrestado es un tal Jason Michael Hurley de 44 años. La policía llegó a esa conclusión después de comparar los resultados de sus huellas digitales con una base de datos del FBI.
Ah qué cosas…